En un estudio publicado en línea por JAMA Ophthalmology, el Dr. Paul Loprinzi de la Universidad de Mississippi, evaluó la asociación del comportamiento sedentario con la retinopatía diabética usando datos de la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud de los años 2005 al 2006.
El comportamiento sedentario fué evaluado con un acelerómetro, y medido durante las horas de vigilia en participantes con 4 o más días de al menos 10 horas/día de uso del acelerómetro. La actividad de menos de 100 minutos se definió como comportamiento sedentario; actividad de más de 100 minutos fué clasificada como actividad física total.
El análisis incluyó 282 participantes con diabetes. El promedio de edad fué de 62 años, el 29% tenía retinopatía diabética.
El autor encontró que para un incremento de 60 minutos en el comportamiento sedentario, los participantes incrementaron un 16% la oportunidad de que empeorara su retinopatía diabética; la actividad fisica total no estuvo asociada con retinopatía diabética.
“La plausibilidad de esta asociación positiva entre comportamiento sedentario y retinopatía diabética podría ser resultado de el incrementado riesgo de enfermedad cardiovascular asociado con el comportamiento sedentario, que puede incrementar el riesgo de retinopatía diabética.
Esta asociación no prueba una causa y efecto. Para saber si la asociación observada tiene una relación de causa y efecto sería necesario hacer estudios de intervención donde los individuos asignados aleatoriamente a incrementar su actividad física total tuvieran una probabilidad menor de que empeorara su retinopatía diabética,” afirman los autores.
Referencia
Foto de Megwynn