Me escribe Agatónica Garbanzo, de Cuenca. Esto es lo que dice (copio y pego):- Hola Sonia. Ante todo, enhorabuena por tu programa, digo... por tu blog. Te escribo porque, a diferencia de todas mis amigas, a mí no me gustan las pulseras de Sara Carbonero. Sí, ésas que se han hecho súper famosas, que salen en todos sitios. Se llaman decenarios, o algo así. Y encima son caras, tengo entendido. Es que no les veo la gracia. Me gustaría que me gustaran, pero es que va a ser que no. ¿Es grave? ¿Qué puedo hacer para que me gusten? Me siento rara y no sé qué hacer. Confío en que tú me ayudes. Gracias.
- Querida Agatónica. Me alegro de que me hagas esta pregunta, porque, mira, la verdad es que a mí tampoco me gustan. Piensa que ese dinero que te ahorras en las pulseritas de marras, te lo puedes gastar en otra cosa. A todas nos preocupa que no nos guste lo que les gusta a la mayoría, pero no hay que dejarse aborregar. La moda es moda, pero hay que tener personalidad. Así que te recomiendo que no hagas caso a nada de lo relacionado con esas pulseras. Cuando no puedea evitarlo y estés a punto de cruzar el umbral de Fun&Basics para hacerte con una de estas pijadas, emborráchate o drógate con lo que pilles, pero no te las pongas jamás. No debes renunciar a tus principios. Lo que sea por conservarlos. Me alegro de que te guste mi programa, y gracias por escribir. Espero que no cuentes esto que te digo a tus amigas, las fans de las pulseras, porque entonces dejarán de leer mi blog, y ni tú ni yo queremos eso, ¿verdad amiga?
(Foto: http://www.elarmariodepandora.com)
Doy voz ahora a otra de mis preocupadas fans. Se llama Eufemia Bogavante, de Alcafrán (Albacete). Y dice lo siguiente:- ¡Sonia! Estoy desesperada, no puedo más. Cada vez que veo un estampado de leopardo, empiezo a convulsionar. Me parece la cosa más choni y poligonera que hay. Pero a la vez, me gustaría llevarlo, porque yo tengo que llevar todo lo que sale. ¿Cómo lo hago? ¿Qué me recomiendas?- Querida Eufemia. El print o estampado de leopardo es una tendencia que lleva ya un tiempo entre nosotras. Lo empezaron llevando los egipcios, se cubrían con ello como símbolo de culto al dios Horus. Sé que esto no nos importa ahora, porque tú crees que es una tendencia de meretrices. Debes saber, en cualquier caso, que también se asocia a los Picapiedra. De ahí tus miedos, quizá. Y sí, todos sabemos que las meretrices en algún momento lo usaron para llamar más la atención de los viandantes, por lo que te recomiendo que si el print en cuestión lo encuentras en una falda que enseña hasta tus entrañas, no lo adquieras, a no ser que quieras que te confundan con Amy Winehouse, claro.
Por el contrario, ahora hay muchas chicas elegantes y discretas que llevan este leopardo encima, sin ser de verdad, claro, aunque siempre hay alguna que compra pieles. De lo que nosotras hablamos es de pieles sintéticas e imitación de los colores de la piel de este animal felino, claro está. Nunca te animaré a comprar animales para vestir. Por eso, resumiendo, te aconsejo que lleves esta tendencia en fulares o complementos, y si te atreves y quieres jugar a ser Kate Moss (aunque, me temo, no lo entenderán en tu pequeño pueblo, desde el que me escribes) puedes comprarte un abrigo. ¡Suerte!
Otra lectora apesadumbrada es Higinia Caramelizada, de Chotacabras (Murcia).
- Querida Higinia. Creo que debes seguir leyendo esas revistas. Aunque sólo sea para ver las fotos, a pesar de que no entiendas nada. La moda es arte e inspiración. Y me alegra saber que en un pueblo como Chotacabras haya una señora que sabe de diseñadores y habla con sus vecinas sobre lo que sale en la Vogue. De todas formas, como veo que se maneja bien con las nuevas tecnologías, le daré dos links, o dos enlaces, para que visite otros blogs en los que le pueden ayudar mejor que yo.Para entender el vocabulario de moda, entre aquí. Y para saber pronunciar los nombres de diseñadores extranjeros, leer este post le vendrá bien también.
Hasta aquí el consultorio de hoy. Otro día daré salida a más e-mails de mis frenéticas lectoras (aunque también hay lectores, eh). Espero que os haya ayudado. Se despide la señorita Martinsky shopper.