Un estudio publicado en la revista 'American Journal of Epidemiology'
por investigadores de la Escuela de Salud Pública y Ciencias de la Salud de la
Universidad de Massachusetts Amherst y la Universidad de Harvard, ambas en
Estados Unidos, evaluó la ingesta de minerales en aproximadamente 3.000 mujeres.
Después de diez años del estudio, 1968 mujeres no presentaron síndrome
premenstrual. Ajustando por consumo de calcio y otros factores, los investigadores
encontraron que las mujeres que consumían la mayor cantidad de hierro tenían un
riesgo de 30 a 40% menor de desarrollar síndrome pre menstrual. También se comprobó
que el alto consumo de zinc se asoció con un menor riesgo. Por el contrario, las
que consumen la mayor cantidad de potasio tenían un mayor riesgo de ser
diagnosticadas con el síndrome premenstrual. Sin embargo, como la ingesta alta
de hierro puede tener consecuencias adversas para la salud, las mujeres deben
evitar consumir más que el nivel de ingesta tolerable de 45 mg por día a menos
que sea recomendado por un médico.