El corazon de una condesaElizabeth BowmanTitaniaFebrero 2017Romantica, Historica352 paginas, 17.50€Independiente
Alberto se marchó lejos de Galicia huyendo de dolorosos recuerdos y de las duras exigencias de su padre para que siguiera el negocio familiar, pero Alberto ansiaba otro destino, pues quería estudiar una profesión y ser un hombre instruido. Cuando parece que encuentra su lugar, ejerciendo su profesión en un bufete, se ve obligado a regresar al Pazo…
Una mañana en la que don Jenaro se presenta por sorpresa, Ana huye al bosque y se cae. Un joven la ayuda. Primero escucha su voz, luego aparece entre los arbustos… Aunque un solo encuentro es suficiente para que ambos entiendan que se pertenecen, su amor es imposible. El destino de Ana ya está marcado… ¿O quizá podría cambiar su suerte?
Este es un libro donde las costumbres, las leyes y el hacer las cosas de la época están muy arraigados en el libro. El papel de la mujer, que no era ninguno en aquella época, el hecho de que no pudieran opinar sobre su destino, ni sobre muchas otras cosas, es una de las partes más fundamentales de las que nos habla la autora.
En este caso con la vida de Ana es cuando comprendemos el papel tan insignificante que le daban a las mujeres. Ana es la joven condesa de Altamira. Una muchacha que se ha criado lejos de su hogar y sin el cariño tan necesario. Pero ahora que ha cumplido los dieciocho y ya no puede seguir en el prestigioso internado, por lo que vuelve al Pazo de Rebolada, su hogar. Ella espera un futuro, hacer realidad su destino de condesa, empezar, por fin, a vivir la vida. Pero lo que encuentra nada más llegar a su hogar, es un futuro ya planeado, negro y sin esperanzas. Un futuro miserable y del que no ve escapatoria.
Alejandro Covas, su padre, es un hombre frio, codicioso y mala persona. Nunca ha querido a Ana y se lo demuestra de mil y una maneras. Los desprecios, las amenazas y la forma de tratarla lo delatan. Para él Ana es un estorbo, solo una moneda de cambio para alcanzar un fin, su fin, su anhelo.
Se nota que este es un libro escrito con cariño, con tranquilidad. La narrativa de la autora te transporta al momento que nos esta narrador y nos envuelve con su esencia, sus descripciones y sentimientos. Cuando Ana conoce al joven Alberto sabe que su corazón ha encontrado dueño. Un solo encuentro, unos pocos minutos en compañía del joven apuesto y ya podemos ver como surgen las chispas de ambos jóvenes.Pero es en los siguientes encuentros, en todos los sentimientos que ambos llevan por dentro por todo lo que experimentan juntos y lo que están viviendo ambos en sus vidas, lo que dotan al libro de todas esas emociones que hacen grande a una novela romántica. Ese saber transmitir, vivir y sentir lo que los protagonistas viven y sienten.
Una historia que evoluciona sin prisa, pero sin pausa, donde tienen cabida toda clase de sentimientos; miedo, ira, rabia, amor, ternura, compasión, celos, envidia, lujuria, vamos, casi puedo jurar que los siete pecados capitales salen expuestos en la obra y todos de las mano de su personaje bien definido.
Un libro bien escrito y con el que he disfrutado de una gran historia. De amor, pero también de época.
Sara.