Hubert de Givenchy nació en Beauvais, Oise (Francia) el 21 de Febrero de 1927 y aunque su familia estaba empeñada en hacer de él un importante abogado decidió no hacer caso a su familia y asistir a cursar sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de París.
Sus primeros pasos en el mundo de la moda fueron en las prestigiosas casas de moda de Lucien Lelong, Piguet o Elsa Schiaparelli, hasta que con el tiempo consigue abrir su propia firma. Admirador y amigo del español Cristóbal Balenciaga, contó con su apoyo y respaldo en sus inicios como creador independiente.
No sería hasta los años 50 concretamente en 1954 cuando conocería a la actriz Audrey Hepburn, la bellísima actriz que ya había recibido el año anterior el "Oscar" de Hollywood por el film "Vacaciones en Roma" había sido la elegida para protagonizar "Sabrina" cuyo vestuario se encargó a Hubert de Givenchy.
Givenchy tenía siempre presente y muy en cuenta el criterio personal de su ya amiga a la hora de crear para ella, su relación era de una confianza tal que ella se permitía el lujo de poner y quitar detalles de las creaciones que él hacia tanto para sus películas como para su vida personal.
La casa de Modas de Givenchy llegó a crear incluso un perfume exclusivo para la actriz que no se comercializó hasta dos años después de su creación. En 1957 Givenchy le comunica a su amiga que van a decidir que otras mujeres puedan también disfrutar de ese perfume tan exclusivo, Audrey Hepburn le respondió al diseñador de la siguiente manera: "Mais c´est interdit !" o lo que es lo mismo "Está prohibido" y es justo ese nombre el que adquiere la fragancia cuando por fin se pone de venta al publico: "L´interdit de Givenchy".
El estilo de Audrey Hepburn que se ha trasladado a nuestros días estando muy presente en las creaciones actuales lo marcaron tres películas que contaron con la colaboración del maestro Givenchy; "Como robar un millón de dólares", "Charada" y "Desayuno con diamantes".
Poseedora de un estilo inconfundible que radica en la elegancia natural y de la ausencia de adornos, tuvo en Hubert de Givenchy el cómplice ideal que supo entender la imagen que ella quería transmitir.
Audrey Hepburn murió a los 63 años, en 1993, habiendo sido una reconocida y admirada actriz y una persona dedicada a las causas humanitarias, cuya imagen sigue presente en nuestros días gracias a una personalidad inconfundible y un carisma que ha traspasado cualquier pantalla cinematográfica.
Hubert de Givenchy ha continuado con su maravillosa labor profesional, fue impulsor del actual museo dedicado a Cristóbal Balenciaga y en 2011 recibió por parte del gobierno español el galardón de la Orden de las Artes y las Letras...
Cuando concede una entrevista no puede evitar recordar a la que fue su musa, su amiga, su confidente.... Audrey Hepburn.