El Disfrute como elemento Creativo.

Por Jjrivero
Hace unos meses publicamos diferentes artículos en Positiva Hoy sobre la teoría de Mihaly Csikszentmihalyi donde describíamos la experiencia caracterizada por el desempeño óptimo, concretamente describía aquellas situaciones donde las personas a la hora de desarrollar una determinada tarea se encontraba en un estado de desarrollo casi automático donde toda nuestra percepción y recursos mentales están puestos en la realización de la misma. Hoy vamos a seguir profundizando en dicha experiencia, basándonos principalmente en comentar la relación entre el fluir y la creatividad, este nuevo fenómeno se convierte en el fluir creativo, donde las personas nos encontramos tan inmersos en una tarea, que parece que el desempeño es espontáneo, por esa misma razón dejamos de sentirnos independientes de su dinámica, planteando  un estado de conciencia ordenado, que nos genera una alta dosis de emociones positivas y de la misma manera una alta capacidad para centrarnos en una actividad intencional. Mihaly nos plantea que cuando realizamos una determinada tarea con la que experimentamos la sensación de flujo, llegamos a experimentar el éxtasis, caracterizado por la implicación de todos nuestros sentidos en el proceso creativo de realización de la tarea, fluimos a través de ella experimentado procesos creativos, ya que cuando experimentamos la sensación del flujo creativo, las metas planteadas en la tarea se aprecian claramente y como avanzamos en la realización de la misma no nos genera frustración con lo cual el desempeño es aún mayor, por esta razón generaremos emociones positivas ya que observamos como nuestras capacidades se corresponden con las posibilidades de acción, nos sentimos equilibrados, con lo cual no aparecen ni el aburrimiento, la ansiedad que se genera será siempre facilitadora, ese nerviosismo que nos mueve a actuar y querer conseguir nuevos retos dentro del desempeño de la misma. En la sensación de fluir nos encontramos profundamente concentrados e implicados en lo estamos haciendo, viviendo una intensa sensación de vivencialidad del presente, junto a un alto sentimiento de seguridad y confianza en nosotros mismo y en el proceso, aunque una de las características más peculiares a la hora del desempeño de la misma está en la pérdida de la conciencia personal, donde el yo se anula, ya que nos encontramos tan inmersos en la tarea que nos despreocupamos de las barreras protectoras que nos marcamos en la interacción con los demás y en las limitaciones que en un estado de conciencia normal no marcaría nuestra propia autoestima, por lo tanto, se convierte en una  experiencia "autotélica" (del griegoauto, en sí mismo, ytelos, finalidad), por cuanto la finalidad de la misma es ella misma. Por la misma razón cuando experimentamos el disfrute, este se obtiene al realizar la tarea y no sólo al conseguir finalizarla. Para Csikszentmihalyi el estado de flujo se produciría cuando a la hora de realizar  la tarea encuéntranos un determinado nivel de realización donde  las habilidades que requieren para el desarrollo de la misma y las metas y desafíos que nos planteamos entran en conjunción. Por esta razón cuando desarrollamos una tarea es demasiado simple y automática en relación con nuestras habilidades, nos aburrimos, y nos perdemos en ella. Por el contrario si la realización de la tarea es compleja y la vemos como un desafío personal que nos podría desbordar, no siendo que poseemos las habilidades adecuadas para el desarrollo de la misma, podremos tener ansiedad. Por ese motivo debemos de tener en cuenta que la importancia de los desafíos nos las marcamos nosotros mismos, nuestras experiencias pasadas a la hora de plantearnos una tarea, que estas pueden influir sobre nuestra percepción de nuestras habilidades, frenando el proceso creativo. Por lo tanto, si confiamos en nuestras habilidades, y adquirimos y potenciamos aquellas que no tenemos y al mismo tiempo interpretamos que somos capaces de solucionar los desafíos que nos propone la tarea, podremos desarrollarla de manera más placentera y creativa, evidentemente la tarea nos debe de resultar atractiva y motivante para que se den las condiciones adecuada para experimentar el disfrute, lo que potenciará la posibilidad de generar el proceso creativo.
Jose J. Rivero Psicólogo Experto en formación Terapeuta Familiar COF 2000