Marisa, clienta y amiga, estaba cansada de su dormitorio y quería darle un aire nuevo y diferente. Su habitación era de un estilo clásico y en madera color caoba, y se decantó por un aire más shabby y romántico. Nos encargó que le buscáramos un cabecero y se quedó con una de las mesitas que teníamos en la tienda. Ambas piezas las hemos lacado en un blanco roto y aplicado unas pequeñas guirnaldas de flores de resina, a las que hemos aplicado una suave capa de cera color bronce. Rematamos el cabecero con dos piñas y éste es el resultado.
Es una pena, pero no tenemos fotos del antes.... ¡Las hemos perdido! Ya sólo queda enseñaros cómo quedan los muebles en el dormitorio de Marisa, cuando acabe de empapelar sus paredes. ¡Nosotras somos las primeras en estar ansiosas por ver esa habitación terminada!
¡Feliz fin de semana!