Un nuevo local para desayunar, comer algo o tomar una copa en pleno paseo de La Ribera, aunque lo que primero llamó mi atención es el ejercicio de imaginación, como han creado un espacio abierto entre las cuatro altas paredes de la estructura vacía de un antiguo club de buceo donde el azul del cielo se convierte en otro elemento más de decoración.
Un nuevo local para desayunar, comer algo o tomar una copa en pleno paseo de La Ribera, aunque lo que primero llamó mi atención es el ejercicio de imaginación, como han creado un espacio abierto entre las cuatro altas paredes de la estructura vacía de un antiguo club de buceo donde el azul del cielo se convierte en otro elemento más de decoración.