El "fallo" del Virtual Safety Car - Análisis de las deficiencias del sistema vistas en Mónaco

Publicado el 04 junio 2016 por Rd @iformulard
Un año y medio después de su implantación, el circuito de Mónaco dejó al aire las vergüenzas del coche de seguridad virtual, que no siempre cumple el objetivo para el que se introdujo en las carreras.
Tras el accidente sufrido por Jules Bianchi que acabaría posteriormente con su vida, la FIA decidió implantar nuevas medidas de seguridad. Una de ellas fue la creación del Safety Car Virtual, que obliga a los pilotos a reducir la velocidad durante un periodo de banderas amarillas sin la necesidad de que el coche de seguridad real salga a pista.
Además de impedir que los coches alcancen altas velocidades mientras por ejemplo otro monoplaza está siendo retirado de pista, la idea era terminar con la injusticia de que un piloto perdiera una ventaja considerable respecto a un rival cuando el Safety Car salía y reagrupaba a todos. Con un limitador de velocidad, se mantendrían las distancias que había antes del periodo de Safety Car Virtual (señalizado por todo el circuito con el cartel de VSC) y la carrera se reanudaría sin que nadie se viera favorecido ni perjudicado.
Sin embargo, el pasado Gran Premio de Mónaco borró de un plumazo esa teoría en la categoría de GP2, donde Artem Markelov remontó a sus rivales más de medio minuto durante la presencia del Safety Car Virtual hasta llevarse la victoria. ¿La clave? La suerte de encontrarse en el momento correcto en el lugar indicado.
Desde que aparece el coche de seguridad virtual los pilotos tienen unos segundos para reducir la velocidad. Si estás en una zona rápida, necesitarás más tiempo para reducir la velocidad y esos segundos que tienes hasta bajar al límite establecido juegan a tu favor ante un piloto que se encuentra en un lugar donde ya se pasa muy cerca de esos 80 km/h, ya que su tiempo de reducción de velocidad es menor.
Pero, por el contrario, es clave dónde estés cuando el periodo de Safety Car Virtual desaparezca (los pilotos son notificados unos segundos antes). Si estás en una zona lenta con curvas de baja velocidad, chicanes y rectas cortas, apenas notarás que se restablece la velocidad normal, pues seguirás a una velocidad (dependiendo de la curva) cercana a la que se alcanza durante el VSC. Sin embargo, si estás en un punto rápido, tardarás varios segundos en alcanzar la velocidad a la que se pasa normalmente por esa zona del circuito.
Esta deficiencia del sistema de Safety Car Virtual podría minimizarse si el periodo dura una vuelta completa, de modo que todos los pilotos pasen por todas las curvas a la misma velocidad, aunque seguiría sin ser un método perfecto. Sin embargo, en Mónaco vimos que la rápida actuación de los comisarios dejaban tiempos muy cortos del VSC, lo cual fue clave en la carrera de GP2, donde obviamente los pilotos que estaban en la parte lenta del trazado callejero (Markelov) se vieron favorecidos.
Puede que la naturaleza única de Mónaco provocara algo que difícilmente podamos ver en otros circuitos, y de momento no está pensado ningún cambio en la norma. Sin embargo, un nuevo episodio en otro trazado podría obligar inevitablemente a revisar un sistema que, en ocasiones y como pudimos ver, no cumple con su objetivo.