Nunca hubiera imaginado que algo que yo sufriera y contara en este blog despertara tanto interés. Tuve acné cuando era aún más joven y una de las mil “maravillas” que apliqué a mi rostro fue Roacutan, un fármaco de Roche. Ya hace tiempo que lo conté en estas páginas. Hoy, tras la sección Mis libros, el post Lo que nunca me cotaron sobre Roacutan es el más leído del blog.
Hace mucho tiempo que se comercializó el fármaco. De hecho, hoy hay varios genéricos del mismo. El caso es que Roacutan, además de arreglarle la cara a algunos y hacer de que se la arreglaba a otras, también ha estado presente en los tribunales de justicia por no conseguir ni una ni otra cosa y además empeorar la situación.
Supuesto de hecho:
Paciente que es tratado de acné con un medicamento que le causa una enfermedad irreversible como la diabetes. Estimación parcial de la demanda dirigida contra el Servicio Vasco de Salud, en reclamación de una indemnización de daños y perjuicios.
RESUMEN:
Un paciente es tratado de acné con un medicamento que le causa diabetes. Con el fin de obtener una indemnización para hacer frente a los daños físicos, psicológicos y morales inherentes al padecimiento de la citada enfermedad, demanda al Servicio Vasco de Salud, organismo del cual dependía el centro público que le trató.
El juez de primera instancia desestima la demanda. La Audiencia revoca esta sentencia, y con estimación parcial de la demanda, condena a la parte demandada a abonar una indemnización de cuantía inferior a la solicitada. Recurrida esta sentencia en casación por ambas partes litigantes, el Tribunal Supremo declara haber lugar a los dos recursos.
Como consecuencia, la sentencia recurrida es parcialmente anulada, dejando sin efecto la imposición al Servicio de Salud de las costas de ambas instancias y fijando en una cuantía superior la cuantía de la indemnización. El Tribunal Supremo considera que la valoración probatoria realizada en segunda instancia es absolutamente lógica y correcta; no obstante, estima que debe elevarse la cuantía de la indemnización dada la gravedad de la negligencia médica y de las consecuencias generadas en el actor.
Bueno, esta es la copia literal de una de las sentencias (de 2004). Quizá tiene un lenguaje demasiado jurídico pero se entiende. ¿Conclusión? Al afectado por Roacutan le indemnizaron con 40 millones de las entonces pesetas. Seguiremos informando porque hay alguna sentencia más.