El gol que salvó una vida

Publicado el 19 diciembre 2011 por Nestortazueco

(La Medialuna, 6cero.com, 19/12/2011)

La siguiente historia no ocurrió en navidad, pero su espíritu podría decirse que es de esta época del año porque, sin saberlo, Javier Zanetti al mismo tiempo que marcaba un gol para Argentina salvaba la persona de una persona de la que no había oído hablar en la vida. 

Nos trasladamos al 30 de junio de 1998. En Polonia, concretamente en la ciudad Szdlowiec, vivía Marek Kopaczen, que era el fiscal de la localidad. Debido a su trabajo, lamentablemente, Marek solía recibir muchas amenazas. Es más, días antes, unos vándalos habían destrozado el techo de su coche, un Toyota Corolla verde, a hachazo limpio.

Por ello, el fiscal decidió que lo mejor era dejar el automóvil en un aparcamiento que pertenecía a la Policía, para que así estuviera seguro y cuando se levantara por la mañana para recogerlo no se llevara ningún disgusto como el que se llevó al ver lo sucedido con el techo. De esta manera Kopaczen adquirió una rutina: primero sacaba a pasear a su perro y cuando llegaba a su casa, más o menos sobre las diez, se marchaba a dejar el coche al aparcamiento de la Policía.

Sin embargo, aquel 30 de junio fue diferente. Cuando Marek acababa de llegar a su casa de dar una vuelta con su mascota se acordó que en aquel instante se estaba disputando un interesante Argentina-Inglaterra correspondiente al mundial de Francia 98. En cuanto puso el televisor, Marek observó que el partido iba uno a dos a favor de los ingleses y los comentaristas hablaban del brillante partido que había cuajado un jovencísimo, y prácticamente desconocido para la gran mayoría, Michael Owen. Sin embargo, poco antes de que terminara el choque Javier Zanetti llevó las tablas al marcador, por lo que ambos equipos tuvieron que ir a la prórroga.

Viendo los grandes futbolistas de los que disponían ambas escuadras, Kopaczen optó por quedarse a ver los 30 minutos de tiempo extra y que ya después iría, como siempre, a dejar el coche al aparcamiento de la Policía, De repente, escuchó un gran ruido que provenía de su propia calle: “Cuando terminó el partido oímos un tremendo estruendo, nos asomamos a la ventana y vimos que ardía nuestro automóvil”.

Se trataba de su Toyota Corolla, al que habían puesto una bomba programada para las diez de la noche, hora en la que habitualmente Narek solía estar dentro del vehículo. El artefacto había sido colocado por una banda de extorsionadores a la que perseguía el fiscal y que había estudiado sus rutinas para deshacerse de él, pero no tuvieron en cuenta el fútbol.

Seis años más tarde, cuando el caso fue juzgado, Kopaczen le envió a Javier Zanetti una carta de agradecimiento por el gol que hizo a Inglaterra y que le salvó la vida. Sin embargo, esta misiva nunca le llegó al jugador del Inter de Milán, que finalmente pudo conocer la historia gracias al legendario jugador polaco Zbigniew Boniek.

“Es increíble que mi gol salvase la vida de una persona, pero la verdad es que yo siempre juego para ganar y eso fue lo que hice en aquel partido contra Inglaterra. Confieso que me gustaría mucho conocer personalmente a la persona que cree que vive gracias a mí”,declaró Zanetti al saber todo. Y es que pocos goles habrá marcado el lateral argentino a lo largo de su carrera, pero pocos tantos se habrán marcado a lo largo de la historia que tengan tanto valor: una vida. Al fin y al cabo se hizo posible gracias al balón  lo que parecía imposible.