Traducido y Adaptado por: Don Cuco
De un Artículo de: Jessie Geoffray
He visto, oído y leído mucho últimamente acerca de la miel o néctar de agave la cual dan como una panacea para endulzar alimentos sin los efectos negativos del azúcar. Hoy en día la palabra “Natural” se ha vuelto una gran herramienta de marketing. Si exageramos un poco… natural también es el tabaco, la marihuana y la cocaína y sin embargo conocemos muy bien sus efectos nocivos en la salud.
Grandes cadenas como Starbucks lo publicitan como ingrediente en sus toppings y postres. Pero… ¿Será en realidad benéfico usar ese sustituto del azúcar de caña o es solo otro mito de moda más?
El Néctar de Agave y la Química
El néctar de agave ha venido ganando popularidad como edulcorante para bebidas y para postres. La forma de publicitarlo es identificarlo como “Natural”. Se vende a la gente la idea de ser una alternativa saludable para la miel de abeja, la miel de maple y el azúcar de caña.
Si apelamos a la química básica, resulta que este producto no necesariamente es más saludable que la miel de maíz de alta fructosa. Este edulcorante es el producto del proceso del jugo del maguey o agave. Este proceso elimina cualquier posibilidad de obtener los beneficios en vitaminas y minerales que tiene el jugo de maguey virgen. (Aguamiel de maguey se le llama en México)
El Verdadero Significado de lo Natural
La popularidad del Néctar de Agave se debe en parte a la creencia de los consumidores de que las cosas naturales son más benéficas. Esto es muy cierto en los alimentos que no son procesados ni alterados para darles mayor tiempo de vida o poderlos empacar para consumo posterior.
De acuerdo a la Dra Katherine Zeratsky, dietista y nutrióloga de la Clínica Mayo, la palabra Natural es una herramienta muy ponderosa de mercadotecnia pues se le imprime el sentido de ser benéfica sin importar lo que sea. Así que la próxima vez que leas, veas u oigas un anuncio publicitario no te dejes engañar.
El Néctar de Agave es un Aditivo Edulcorante
La conclusión que podemos sacar de lo anterior es que un azúcar saludable no existe realmente. Todos los edulcorantes calóricos – llámense néctar de agave, miel de abeja, miel de maíz, azúcar de caña, azúcar mascabado, piloncillo etc. Son poco saludables si no se consumen con moderación.
Los edulcorantes son buenos desde la perspectiva que hacen la comida más apetecible. Con frecuencia los chefs agregan la miel de agave por el hecho de que no requieren agregar demasiada para obtener un buen sabor.
No se Trata de Evitarlos sino de Mantener un Consumo Moderado
En promedio la gente consume mucho más azúcar de la que es saludable para su cuerpo. Como los azucares contribuyen con cero nutrientes, las calorías añadidas se acumularán al metabolizarse hacia grasas. Esto nos dará sobrepeso y en casos extremos obesidad con todas sus consecuencias.
La Asociación Americana del Corazón recomienda que las mujeres limiten su consumo diario de azúcar a no más de 6 cucharadas cafeteras y los hombres 9. Cuando leas las etiquetas nutricionales toma en cuenta todas las azucares añadidas que aparecen bajo diferentes nombres – Sea azúcar de caña, miel o néctar de agave.
Una Prueba Interesante
La Dra Zeratsky está convencida que consumir demasiada azúcar puede llevarnos a sub apreciar el sabor tan agradable de las frutas y vegetales. Estamos perdiendo el aprecio por el sabor dulce de una rebanada de fruta.
Ella misma sugiere que eliminemos temporalmente los edulcorantes de nuestra dieta, digamos por dos semanas. Durante ese periodo escoja alimentos que contengan menos de 5 gramos de azúcar añadida o menos por porción y evite totalmente los edulcorantes artificiales como Splenda o Nutrasweet. Añada frutas a los alimentos para mejorar el sabor.
La Dra Zeratsky vaticina que a las dos semanas tus papilas gustativas se habrán reajustado y empezarás a apreciar la dulzura de vegetales como las zanahorias.
Fuente: e How