Podríamos afirmar que el microcemento es uno de los materiales de moda. Su imagen industrial, irregular, con una textura cálida al tacto parece recordarnos a los estucos clásicos. Últimamente lo encontramos en suelos, paredes, techos, mobiliario… pero, realmente puede aplicarse en todas esas situaciones y poder funcionar en todas ellas? En MyRevest presentan una serie de acabados diferentes y composiciones apropiadas para cada trabajador, de tal manera que parecen dar respuesta a la pregunta, sí, va con todo, pero hay que saber aplicarlo.
A continuación daremos una serie de notas generales y más adelante entramos en materia. Vamos allá.
De forma genral podemos afirmar que se trata de un revestimiento continuo utilizado como acabado, de poco espesor, que se puede aplicar en finas capas de 3 milímetros sobre cualquier tipo de superficie y en cualquier posición, siendo los más habituales suelos y paredes , aunque también se aplica sobre pequeños elementos como lavabos y bañeras de obra.
El sistema constructivo está compuesto por una base cementicia, minerales seleccionados, resinas acrílicas y pigmentos. Si el soporte es resistente garantiza una rápida transición, gracias a su ausencia de juntas. Si el material de soporte está dañado es conveniente retirar capas y buscar el firme, para aplicar sobre él posteriormente las capas base del microcemento, que como verás siempre hay que aplicarla, porque se trata de un sistema que se aplica superponiendo capas.
Tipos de microcemento según su forma de aplicación
Microcemento bicomponente
Esta gama de microcementos (cemento y resina) está pensada para el aplicador que quiere crear sus propias mezclas, para conseguir acabados muy personales. Su formulación permite la máxima adherencia y excelente trabajabilidad. De esta manera, el aplicador la posibilidad de tener en su llana morteros de preparación y terminación con variedad de texturas que el mismo puede personalizar, si ya está habituado a trabajar con el material y es capaz de anteponerse al resultado, que en ocasiones puede ser una sorpresa!
Microcemento listo para usar
Es el antagonista del anterior. En este caso se puede entender como un empastado. Este producto parece hacer la vida más fácil al aplicador. Se trata de un producto innovador que proporciona un acabado de color más continuo en paredes y suelos ya que unifica la composición. El proceso de elaboración de la masa es sencillo, basta con añadir el pigmento y batir para lograr el material de revestimiento. Es ideal para los profesionales que quieren renovar una superficie optimizando al máximo los tiempos de trabajo.
Microcemento epoxy
Si buscas un microcemento con base agua de altas prestaciones para acabados decorativos tienes que mezclarlo con epoxy, o mejor dicho, elegir el propio que venga contenido en la mezcla. Esta mezcla se formula para ser aplicada en interiores, como revestimiento continuo de bajo espesor en suelos y paredes. Especialmente recomendado en zonas con alto desgaste como suelos de garajes, naves industriales donde pasan vehículos pesados o se transportan grandes pesos.
Microcemento monocomponente
Si estás buscando un producto que proporciona a la superficie una gran dureza y una elevada resistencia mecánica deberías de utilizar este sistema. Ahorra al aplicador hacer la mezcla y reduce por lo tanto los gastos de transporte. Es el microcemento que contiene la resina en polvo y está pensado para el aplicador que desea renovar ambientes ambientes y apostar por revestimientos resistentes.
Microcemento tadelakt
Esta composición de microcemento con base de cal es bicomponente y ha sido formulado para ser aplicado como revestimiento continuo de bajo espesor en suelos y paredes. Destaca por su acabado artesanal, su trabajabilidad y su extrema dureza. Como todos los microcementos se aplica mediante llana en varias manos permitiendo lograr una gran variedad de efectos como acabados tadelakt u imitar al homigón visto.