Cada 365 días los seres humanos marcan en su calendario un año más de vida, esto quiere decir que las personas envejecen sin detención, sin embargo las poblaciones pueden envejecer o rejuvener.
Kalache (1987), citado en Banbeira (2009): “para que una población envejezca es necesario, que primero nazcan muchos niños; segundo, que los mismos sobrevivan hasta edades avanzadas y que, simultáneamente, el número de nacimientos disminuya".
Así, el número de joven disminuye y la cantidad de personas de avanzada edad aumenta. Banbeira señala que se advierte que en el 2045 cada mujer tenga un promedio de dos hijos. El envejecimiento demográfico es un proceso que está ligado a un factor socioeconómico. Es el resultado del descenso de la fecundidad, las migraciones y el aumento de las expectativas de vida, debido a un aumento de las naciones de su capacidad para evitar las muerte tempranas y dar libertades para limitar el número de hijos. (CEPAL 2003, IMSERSO 2011, OMS 2012)
En el siglo XXI se percibe un fenómeno de envejecimiento demográfico, con proporciones y procesos variados. Al respecto, Banbeira (2009) señala que el porcentaje de senescentes en los países desarrollados es de 21%, frente a 8% en los países en desarrollo. Ahora bien, el futuro se dibuja diferente ya que en el 2050 prácticamente el 80% de la población mundial adulta mayor se ubicará en los países en desarrollo. La OMS (2012) agrega que en Chile, China y la República Islámica del Irán tendrán más personas mayores de 60 años que en los Estados Unidos de América. La figura 2 muestra cómo está aumentando la proporción de personas mayores en todo el mundo. (OMS,2012)
La Organización Mundial de la Salud (2005) informa que en el 2025 se proyecta una cifra de más de 1000 millones de adultos mayores de 60 años -en su mayor parte en el mundo en desarrollo- y, a su vez, se estima que esta cantidad se duplique para 2050. Para ese año ya se estima es predice que China contará con 100 millones de personas de este grupo etario y 400 millones en toda la esfera terrestre. (agregar cuadros de envejecimiento) (OMS,2012) En específico, Japón en el 2005 presenta 26,3% de la población con 60, Italia 25,6%, Alemania, 25,1%, Suecia 23,4% y Grecia 23,0%. Este crecimiento tiene los siguientes patrones comunes: Urbanización adecuada de las ciudades, buenas prácticas de nutrición, higiénicas y sanitarias, buenos ambientes laborales, avances tecnológicos en la agricultura y menos enfermedades infecciosas por los avances científicos .
Estos cambios derivan de las transformaciones económicas y sociales acaecidas a partir de la Revolución Industrial (Banbeira, 2009) Cabe destacar que en lugares como Suecia, el envejecimiento es paulatino pero otros países experimentan esta transición más deprisa. En relación a este aspecto la Organización Mundial de la Salud (2012) aporta: "Mientras que se tardaron más de 100 años para que la proporción de la población francesa de 65 años o más aumentara del 7% al 14%, países como el Brasil, China y Tailandia experimentarán el mismo cambio demográfico en poco más de 20 años" América Latina y el Caribe no escapa del envejecimiento paulatino pero inexorable, aunque también con situaciones distintas que conllevan prioridades a corto plazo diferentes. (CEPAL, 2003)
Para Guzmán (2002), este proceso avanza más en Uruguay, Argentina, Cuba y Chile y en países del Caribe como Trinidad y Tobago y Barbados; allí, más del 10% de la población tiene más de 60 años. En Guatemala, Bolivia, Paraguay, Honduras y Haití el porcentaje es menor de 6.5%. "En esta región, la tasa de personas mayores de 60 años aumenta rápido y este proceso se presenta antes de que se produzca un aumento considerable de la riqueza" (Banbeira, 2009). Añade que se agrega un problema de inequidad social, baja cobertura de la seguridad social y deterioro en las redes de apoyo familiar.
En CEPAL (2003) el tema del envejecimiento acelerado en América Latina y el Caribe también se coloca como uno de los tópicos principales. Aparte de los puntos que se exponen en el párrafo anterior, se añade una creciente participación laboral en el mercado informal y la necesidad de ayuda a las mujeres en el interior de las familias ya que también existe una desigualdad de género, etnia y raza que repercute en la calidad de vida de las personas mayores.
El especialista en seguridad social de la oficina subregional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para el Cono Sur presenta que esta desigualdad es el resultado de una baja cobertura en el sistema de seguridad social. (CEPAL, 2005) Al mismo tiempo que se asume una disminución de las redes de apoyo, también nace una ventana de oportunidades por "la disminución de la tasa de dependencia demográfica y la consecuente baja de la carga que representan los niños, niñas y adolescentes y las personas mayores para la población en edad de trabajar". (CEPAL, 2003)
El aumento de la longevidad plantea un nuevo concepto de vejez, ya que 10 o 20 años más de vida ofrecen un abanico de nuevas opciones. Implica transformaciones en las políticas de las naciones.