De todos es sabido, y ya escribimos de ello en su día (nuestro ya famoso "mamotreto"), que la vuelta del vinilo ha supuesto el regreso a nuestros hogares de los añorados tocadiscos... Pero hoy damos una vuelta de tuerca más, dando una paso atrás en el tiempo y recordando el origen de su antecesor. El gramófono (del griego, gamma-escritura, y fono-sonido) fue el primer sistema de grabación y reproducción de sonido a través de un disco plano. Inventado por Emile Berliner en 1887, fue el resultado de las mejoras del fonógrafo de Thomas Edison, que grababa sobre cilindro y que tenía un uso muy limitado. Estos artilugios, y sus discos de 78 revoluciones por minuto, también se han hecho usuales en algunos hogares, donde se mantienen, generalmente, por herencia. Porque, aunque la gramola no ha logrado alcanzar la buena acústica de su predecesor, su belleza supera estas deficiencias y consigue decorar con presencia y aire vintage cualquier rincón. Foto Foto Foto Foto Foto ¿Os gustan las gramolas? ¿Tenéis alguna en casa?