Tras 29 años de servicio en la Armada Española, 2.300 días de mar y 33.000 horas de inmersión, el submarino «Siroco» causó baja ayer tras una ceremonia de despedida presidida por el almirante jefe del Arsenal, vicealmirante Fernando Zumalacárregui.
El submarino «Siroco» fue el segundo de la clase «Agosta» de la que se dotó la Armada en los años 80. Conocidos como los S-70, cuatro son los submarinos de la Armada pertenecientes a esta clase: «Galerna» (1983), «Mistral» (1985), «Tramontana» (1986) y el propio «Siroco» (1983), el primero de ellos que causa baja.
Este tipo de submarinos fueron desarrollados por los astilleros franceses DCN de Francia en los años 70 y construidos en España por la Empresa Nacional Bazán, actual Navantia. Los submarinos españoles están basados en el proyecto de los submarinos franceses Clase Agosta, que a su vez recogían la tecnología de la Clase Daphné.
Recopilación de información en una zona de interés durante un tiempo prolongado, el control del tráfico mercante, apoyar a la lucha antiterrorista, operaciones antidroga y la disuasión han sido algunas de sus misiones más frecuentes en los últimos años.
Clase S-80, el submarino español mas avanzado
Actualmente, la empresa estatal Navantia desarrolla un modelo de submarino netamente español, el S-80,del que ya hemos tratado en diferentes artículos de este blog.
Está previsto que se dote a la Armada con cuatro unidades cuyos nombres son «Isaac Peral», «Narciso Monturiol», «Cosme García» y «Mateo García de los Reyes». La Armada espera recibir estos submarinos plenamente operativos entre 2015 y 2018.
Junto al «Siroco», también se dio baja ayer de la Lista Oficial de Buques de la Armada al patrullero «Chileu», con base en Ferrol. Este buque procedía de la reconversión del pesquero arrastrero «Pescalonso», construido para la Secretaría General de Pesca Marítima en 1988. Tras realizarle las obras de reconversión, comenzó a operar el 6 de agosto de 1992 como patrullero de vigilancia pesquera.