El tratamiento rehabilitador para la espasticidad o rigidez muscular

Por Marimarussi
La espasticidad es un trastorno motor caracterizado por un aumento anormal del tono muscular (hipertonía).
 Esta patología se debe a un daño o lesión en la parte del sistema nervioso central que controla el movimiento voluntario. Este daño interrumpe importantes señales entre el sistema nervioso y los músculos, causando un desequilibrio que aumenta la actividad muscular y produce espasmos.
 Puede dificultar la movilidad, la postura y el equilibrio, afectando a la capacidad de mover uno o más miembros del cuerpo, o uno de los lados. Es común tener los hombros, brazos, muñecas y dedos de las manos en un ángulo anormal debido a la rigidez muscular.
Para tratar con éxito la espasticidad es preciso abordar su valoración y tratamiento de forma multidisciplinar (cirujanos ortopédicos, fisioterapeutas, logopedas, neurocirujanos, neurólogos, rehabilitadores, terapeutas ocupacionales,…).
El ejercicio, incluyendo el estiramiento muscular, puede ayudar a que los síntomas sean menos severos.
 Una de las herramientas más valiosas para el tratamiento rehabilitador, ha sido la incorporación de BOTOX® (toxina botulínica tipo A) a los esquemas tradicionales. Al ser infiltrado directamente en la zona afectada, este medicamento relaja el músculo y permite trabajar con ejercicios que generen mayor estimulación y que en condiciones normales el paciente no podría realizar.