Uff, ya hace tiempo que no subo nada en el blog, entre las bodas, comuniones y cosas de família se me ha pasado...
Bueno, lo que quiero decir con este post es que cada vez que preparo mis jabones para algún evento, pienso si realmente la gente que va a recibir estos detallitos lo va a apreciar. Los artesanos pasamos horas y horas creando nuestras ideas, a veces sin dormir, pensando como lo va a ver la gente y si les va a gustar, y en el caso de jabones artesanales, si los van a usar o acabarán como cualquier detalle del "chino" en el cajón del armario.
Es cierto que aquí la gente no suele utilizar mucho jabón en pastilla, algunos (sobre todo los más jóvenes) ni siquiera saben como usarlo. A mi personalmente me da mucha pena, ya que estamos perdiendo la costumbre de toda la vida, lo que para nuestras madres y abuelas era tan normal. También me entristece que ahora los productos "ecológicos" o "orgánicos" nos parecen una cosa excepcional cuando es (o era) lo más natural del mundo. Ya no encontramos tomates con sabor a tomates, patatas que no parezcan una masa de almidón aguada o manzanas que sepan a algo, en lugar de una bola cubierta de cera...
No obstante, me alegra ver que todavía hay gente que sigue interesanda en los productos naturales (sea en cosmética o alimentos) y que les enseña a sus hijos que ESTO es lo lógico y lo normal. Espero que algún día volveremos a ver en las estanterías de los comercios los olores y los colores de la tierra, las cosas auténticas de verdad, y que algún día alguien va a decir a su hijo: "Cuando yo era pequeño como tu ahora, las fresas eran de plástico".
Quiero agradecer a todos los novios que han escogido los detalles artesanales y naturales para su gran día y espero que siga así!
¡QUE VIVAN LOS NOVIOS!