Sin embargo, no ha sido fácil. Paddy Lowe, director técnico ejecutivo de la marca, ha explicado en un vídeo de Mercedes que el equipo ha trabajado muy duro para reforzar su chasis y adaptarlo a las nuevas pruebas de impacto de la FIA en la zona que rodea la cabeza del piloto, las cuales son ahora mucho más estrictas que las anteriores.
"El chasis ha de poder soportar cinco toneladas más de fuerza lateral. Es un aumento bastante significativo. Se prevé que mejore ostensiblemente la protección del piloto ante grandes piezas, incluyendo un coche completo que llegase a este punto del cockpit. Ha sido un trabajo muy duro para los diseñadores del chasis", ha concluido.