Existen diversos tipos según donde se localice:
- En la trompa (tubárico), que es la forma más frecuente (98%) y, dependiendo de la porción de la trompa en la que se produzca tendremos: localización ampular (60%), localización ístmica (35%) o localización intersticial (3%)
- En el ovario (ovárico)
- En la cavidad abdominal (abdominal)
- En el cuello uterino (cervical)
- En otras localizaciones que son mucho más infrecuentes
La frecuencia del embarazo ectópico es de un 0,6-2% del número total de partos.
Causas del embarazo ectópico
Las causas de embarazo ectópico no se pueden demostrar en la mitad de los casos.
Existen una serie de factores que sí favorecen su aparición, entre ellos se encuentran:
- la enfermedad inflamatoria pélvica, que es el más importante.
- la cirugía tubárica.
- el fallo de algunas técnicas anticonceptivas, como la esterilización tubárica o los DIU.
- algunos tratamientos para corregir la esterilidad, como la inducción de la ovulación mediante hormonas o la fecundación in vitro.
En condiciones normales un óvulo es fecundado en una de las zonas de la trompa de Falopio (llamada porción ampular), y desde allí debe ser transportado hasta su lugar de implantación en el útero. Este proceso de implantación ocurre el 6º-7º día después de la fecundación del óvulo.
En el embarazo ectópico se produce un retraso en el transporte del óvulo, por lo que éste se implanta allí donde se encuentre, cuando pasen esos 6-7 días.
Síntomas del embarazo ectópico
Los síntomas de un embarazo ectópico dependen de cómo evolucione.
Un 10% se resuelve espontáneamente y puede llegar a pasar inadvertido, pero el 90% da lugar a un aborto tubárico o a una rotura tubárica, que dan síntomas más evidentes y se conocen como embarazo ectópico accidentado.
Embarazo ectópico en evolución
Se caracteriza por presentar dolor difuso abdominal, falta de la menstruación durante 6-8 semanas, síntomas iniciales de un embarazo normal (náuseas, mareos, tensión mamaria…) y hemorragias vaginales intermitentes de escasa cantidad y color oscuro.
Embarazo ectópico accidentado
El síntoma más llamativo es un dolor abdominal muy intenso que se acompaña de una hemorragia vaginal constante.
¿Cómo se diagnostica?
Lo principal para diagnosticar un embarazo ectópico es sospechar su existencia por la clínica que produce y por la presencia de factores que favorezcan su aparición (antecedentes de alto riesgo). Cuando se sospeche, habrá que realizar una exploración física y una serie de pruebas complementarias, para poder confirmar su existencia.
En la exploración física se realiza un tacto vaginal, en el que se valora el grado de dolor; a veces se palpa una masa redondeada y blanda en la zona pélvica, y el útero es de menor tamaño del que correspondería a estas alturas del embarazo.
En cuanto a las pruebas complementarias deben realizarse las siguientes:
- Test de embarazo: que demuestra que realmente la paciente está embarazada, mediante el estudio de los valores de una hormona (ß-HCG).
- Ecografía: sirve para visualizar la presencia del feto fuera de su lugar habitual, aunque puede dar imágenes dudosas que habrá que confirmar con otras pruebas.
- Laparoscopia: se utiliza en casos dudosos ya que es una prueba muy fiable, pues con ella se visualiza directamente el EE.
- Legrado uterino: con esta prueba se estudia al microscopio el interior del útero y se observan unas alteraciones muy características, conocidas como el signo de Arias-Stella.
Tratamiento del embarazo ectópico
El tratamiento de rutina del EE es quirúrgico e inmediato.
Dicho tratamiento puede ser radical o conservador, en función del deseo de la paciente de tener o no más hijos y del estadio evolutivo del embarazo ectópico:
Tratamiento radical
Consiste en una técnica quirúrgica llamada salpingectomía, en la cual se extirpa la trompa que esté afectada. Esta técnica está indicada:
- cuando la mujer no desea mantener su fertilidad
- cuando la gravedad de la hemorragia obliga a una intervención urgente
- cuando la trompa está muy lesionada
Tratamiento conservador
Se puede realizar mediante dos técnicas quirúrgicas distintas: la salpingostomía y la expresión tubárica. Estas técnicas están indicadas cuando la mujer desea mantener su fertilidad.
En algunos casos la cirugía puede representar un riesgo para la mujer, entonces está indicado el tratamiento médico con metrotexato, que detiene el crecimiento del EE, favoreciendo así su resolución espontánea.
¿Cómo puedo evitarlo?
Al no estar totalmente demostradas las causas que producen un embarazo ectópico, lo más importante es consultar a su ginecólogo cuando se desee tener un hijo y la mujer presente algunos de los factores que favorecen su aparición.
Toda mujer que esté embarazada debe acudir a su ginecólogo en cuanto presente cualquier tipo de sangrado vaginal o si aparece un dolor abdominal muy intenso, para que pueda valorarlo el médico.
Así mismo, si se sospecha que puede estar embarazada y aparece un sangrado de características distintas a la menstruación normal, también se debe consultar al ginecólogo.