El científico explicó que la vacuna TERAVAC-HIV-1, desarrollada a partir de “una proteína recombinante (mediante técnicas de ingeniería genética)”, busca inducir “una respuesta celular contra el virus” de la innunodeficiencia humana.
Iglesias pidió “no crear falsas expectativas”, pues “no existe un modelo animal de la infección del sida que reproduzca la enfermedad tal cual ocurre en humanos”.