En el lugar en que habites consagra siempre un sitio a lo sagrado
Por Ana
Es algo que desde pequeña me ha gustado, pero no lo he realizado aún. Un lugar en la casa dedicado a lo sagrado. Cuando entras en estos lugares te sientes muy bien, independientemente del credo que represente. Es un lugar donde estar tranquilo, meditar, orar, hacer yoga, respirar. Me gustan especialmente los lugares de suelo de madera en los que entras descalzo y despacio. Ya el solo hecho de quitarte los zapatos te
marca otro ritmo. Un altar con una representación de quién uno quiera, unas velas, unas plantas, una alfombra, una campana,.. Me encanta. Un lugar donde estar uno consigo mismo y con lo sagrado. Y si no podemos disponer de una habitación completa, pues un rinconcillo. Esto es algo que voy a materializar pronto.El consejo 72 de Gurdjieff a su hija fue:
En el lugar en que habites consagra siempre un sitio a lo sagrado.