Energía y felicidad

Por María Jesús
Sucede con frecuencia que terminamos nuestra jornada tan cansados que no tenemos ganas, por así decirlo, ni de ser felices. Sólo queremos dormir o atontarnos con la televisión porque estamos tan exhaustos que nos desconectamos, nos hemos quedado sin energía. Hay personas que siempre están cansadas y van por la vida en modo off, y podemos darnos cuenta de que contemplamos su cuerpo, pero su alma no está, y eso en los trabajos pasa con frecuencia. Por eso creo que deberíamos pararnos a analizar porque gastamos tanta energía, y seguramente nos daremos cuenta de que gran parte se va en cosas inútiles que no nos aportan nada. Como por ejemplo:
- Huir de las cosas que nos desagradan
- Aparentar ser lo que no somos
- Intentar ser siempre políticamente correctos
- Hablar de tonterías
- Hablar de temas personales y que nos preocupan a gente que no nos aprecia de verdad
- Reír superficialmente
- Quejarse
- Preocuparse de algo que no tiene remedio
- Intentar trabajar lo menos posible por el mismo sueldo
- Hacer la pelota al jefe
...
Perdamos ahora un poco de energía en reflexionar sobre esto, y empecemos a vivir conscientemente, porque cuándo vivimos el presente y hacemos las cosas con plena atención la perdida energética es mínima.