Enfermedades sin cura oficial

Por Yoisasi

Leucemia: La asesina de los más pequeños.

‘Todas las enfermedades se pueden curar, pero no todas las personas‘. George Ohsawa (fundador de la Macrobiótica). Creo que tenía mucha razón.

Hablemos de enfermedades que según los expertos no se saben por qué aparecen y nuestro único consuelo es el consumo de una gran variedad y cantidad de medicamentos para calmar a nuestra mente (miedo, desesperación) y tapar los síntomas pero sin curarnos definitivamente, ya que no curan la raíz.
De las enfermedades que hablo son: cirrosis hepática, tuberculosis, artritis avanzada, nefropatías, y las famosas enfemedades autoinmunes como el Alzheimer, esclerosis lateral amiotrófica, esclerosis múltiple, sida, lupus eritematoso, artritis reumatoide y no quiero olvidarme de hacer mención a la enfermedad que gana a todas, el cáncer, que está matando a tanta gente de una manera muy cruel por seguir las pautas de la medicina alopática con la quimioterapia o la morfina.
Una cosa quiero que quede clara, estas enfermedades no aparecen así como de la nada, se trata de una acumulación por parte de nuestro cuerpo de materia tóxica, por un mal funcionamiento y cambio estructural de nuestros órganos y por una mente insana (estrés, apatía, depresión, miedos, frustración, ansiedad…).

La excesiva medicación y su pésima nutrición son dos de las causas del Alzheimer.

Me gustaría que mucha gente dejara de pensar eso de: ¿Por qué a mi? Pues porque no te has preocupado por tu cuerpo, porque tus órganos saturados ya se han cansado y no pueden más, porque la industria alimentaria y la farmacéutica han colaborado para que ello ocurra, porque la contaminación, los chemtrails, los microondas y la cantidad de antenas que nos rodean y el estrés acumulado son otro aliciente más para que nuestro sistema inmunitario se debilite y al final enferme.
Muchas de las enfermedades nombradas si están en su primera fase suelen responder bien a un cambio de alimentación. Por ejemplo:
- Eliminar las solanáceas (patatas, tomates, pimientos, berenjenas) y sin lácteos es muy efectiva para la artritis, artrosis, dolores articulares y osteoporosis.
- Eliminar la comida basura, así como alimentos altos en sodio y las grasas y las proteínas animales ayuda en el tratamiento de acumulaciones en los vasos sanguíneos, así como en la obesidad, colesterol…
- Eliminar los productos fermentados y azúcares (panes, bollería, enlatados, lácteos, ahumados…) elimina las cándidas.
- Llevar una alimentación macrobiótica ha curado muchos cánceres.

Quimioterapia: Remedio Letal contra el cáncer.

Siento que muchas de nuestras enfermedades son a causa de alimentos manipulados, adulterados y extremos. Pero no son ellos los únicos culpables ya que muchos medicamentos que nos receta nuestro médico de cabecera para simples síntomas (resfriados, dolores de estómago, dolores de cabeza, insomnio…), que podrían desaparecer solos, nos causan a la larga estas insidiosas enfermedades. Uno de los componentes de estos medicamentos recetados es el aluminio, un metal pesado que se encuentra en los antiácidos, protectores intestinales (menuda protección) y también en la sal comercial (aluminado silicosódico), así como los polvos para hornear y toda la repostería prepararada con ellos, la leche en polvo, el café instantáneo, las bolsas de té,muchos aditivos alimentarios, los desodorantes, los dentríficos y las ollas para cocinar, mermando las reserva de fosfato que nos lleva entre otras cosas a una pérdida de calcificación ósea y al ‘incurable’ Alzheimer.
Veamos más medicamentos:
- Los antihistamínicos como la cimetidina y la ranitidina tienen efectos secundarios como dolores de cabeza, mareos, boca seca, sarpullidos, estreñimiento o diarrea, fatiga y reducción en la absorción de nutrientes.
- Los fármacos como omeprazol, lansoprazol y pantoprazol que detienen la secreción de ácido en el estómago, producen náuseas, gases, estreñimiento, dolores de cabeza, mareos y sarpullidos y la absorción de las proteínas se verá disminuida. Todo medicamento que bloquee la segregación de una sustancia esencial y natural del organismo debería eliminarse por mucho que ese fármaco elimine los síntomas.
- La famosa cortisona y sus derivados actúa sobre los síntomas pero no sobre la causa, entorpece la función de las glándulas suparrenales reteniendo sodio, llevando a alteraciones cardíacas y renales, inflamando la mucosa estomacal y nos predispone a coger infecciones.
- Los analgésicos como ácido acetil-salicílico y fármacos antiiflamatorios no esteroídicos generan úlcera. Contienen colorantes, edulcorantes artificiales (aspartamo) y aditivos químicos que agravan los problemas digestivos.
- El fármaco metotrexato para el cáncer (usado además en quimioterapia), artritis, psoriasis y el aborto (en combinación con misoprostol) destruye el ácido fólico y puede provocar fibrosis hepática, pancitopenia (reducción de glóbulos rojos, blancos y plaquetas y afecta a la médula ósea), cirrosis y neumonitis.
- Los diuréticos que se recetan para controlar la hipertensión arterial privan al organismo de potasio, vitaminas del complejo B, magnesio y cinc.
- La colestiramina, que se receta para reducir el colesterol, puede privar al organismo de las vitaminas A, D, E y K y de potasio.
- Pero la droga de uso más común, el alcohol, que está presente en muchos de los medicamentos para el resfriado sin receta y en medicamentos homeopáticos, reduce los niveles en la sangre de vitaminas A, B1, B2, biotina, colina, niacina, vitamina B15 (ácido pangámico, un antioxidante), ácido fólico, magnesio y vitamina C. Y cuando envejecemos, nuestros cuerpos producen menos cantidad de la enzima necesaria para descomponer el alcohol, sintiendo los efectos del alcohol con mayor rapidez y nos priva de nutrientes vitales y disminuye nuestra capacidad para pensar con claridad.

Vacunas: Agrediendo nuestro cuerpo desde bien pequeños.

- El uso desmesurado de antibióticos y vacunas (desde bien pequeños ya están adulterando y molestando a nuestro organismo enfermándolo con los años) está en las principales causas de los trastornos del sistema inmunitario.
¿Ustedes creen que me voy a fiar de la OMS (Organización Manipuladora Social) sabiendo toda esta información y más que no cuento por no alterar al personal?
Todos ya sabemos que la función de nuestro sistema inmunitario es atacar y expulsar los cuerpos extraños como bacterias, virus, injertos y trasplantes. En casos de trastornos de nuestro sistema inmuntario como alergias, asma, lupus eritematosos, artritis reumatoide, cáncer o sida, éste se equivoca y ataca los propios tejidos del cuerpo. Por tanto, creo que ya no es de hipocondríaca pensar que las enfermedades autoinmunes (epidema actual) es por el aumento de vacunaciones en masa (como borregos), por intromisiones, intervenciones químicas y la ya implantada a la fuerza quimioterapia, que no cura el cáncer pero se sigue utilizando, haciendo la vida insufrible a los enfermos y encima vendiéndoles que es su única salida: Te morirás o te morirás.
A mi pesar tengo que decir que cuando nuestro sistema inmunitario está muy gravemente dañado por todo lo anterior  es muy difícil sanarlo a través de un cambio de alimentación, ya que, en estos momentos, es tal la agresión a nuestro cuerpo que es muy complicado poder hacer algo al respecto. Aquí hace falta además que la persona quiera realmente curarse. Por mucho alimento sano que tomemos si nuestra parte emocional no quiere sanar, no habrá nada que hacer. Pero cuando el daño es de poco alcance una buena nutrición ayudará a que exista la autocuración.
Lo bueno que tenemos es que la mayoría de las veces nuestro cuerpo se autocura si le ‘dejamos en paz’, es decir, mediante descanso, elección apropiada de alimentos completos, algún que otro alimento medicinal, meditación para estar en paz y sin estrés mental, un ejercicio no agresivo, ser consciente del momento actual, de lo que estamos viviendo… Con todo esto podremos recuperarnos más fácilmente.
Quiero terminar diciendo que la nutrición natural no es una panacea o una poción mágica que nos va a curar de tantos años de automalnutrición y autoagresión simplemente haciendo una ‘dieta express de un mes’ o yendo a una clínica de ‘limpieza’ unas dos semanas. Es decir, que si sabemos que tenemos alguna de estas enfermedades debemos hacer un cambio más grande, un cambio de estilo de vida, un cambio, abandonando todo lo que nos ha causado el mal y seguir un camino nutricional y mental auténtico y para largo tiempo, con constancia y confianza en lo que estamos haciendo, que nos ayudará realmente a llegar a la curación.
Como siempre decir, que si no queremos  caer enfermos, gravemente enfermos, debemos empezar a cuidarnos ahora mismo (prevención), a eliminar de nuestra vida todas las atrocidades indigestas que entran por nuestra boca y nuestra mente y ser conscientes que toda esta basura es la que crea más basura al cuerpo (contenedor corporal) llegando la grave enfermedad y nuestro médico nos dirá que no sabe por qué ha ocurrido pero que te dará unas pastillitas que te dejarán ‘divino de la muerte’.
Salud y Prevención con Buenos Alimentos.
Yo Isasi
www.nutricionencasa.com