Enfermeras andaluzas han iniciado su formación y acreditación para colaborar con los médicos en la prescripción del tratamiento farmacológico individualizado. El objetivo fundamental de esta iniciativa es aumentar la seguridad y los beneficios para los enfermos crónicos, porque podrán tener un acceso más fácil y ágil a sus medicamentos. Actualmente están en proceso de formación y acreditación en el seguimiento protocolizado del tratamiento de la diabetes un total de 22 enfermeras, a los que seguirán otros procesos como sedación paliativa, anticoagulación oral, hipertensión arterial, dislipemias.
Esta nueva competencia permite que las enfermeras, una vez acreditadas y siempre que el médico referente lo solicite y derive según protocolo, puedan realizar el seguimiento del tratamiento farmacológico indicado previamente por el médico al paciente. Así, la enfermera tendrá la capacidad de variar la intensidad o la dosis de la terapéutica para adaptarla a la evolución que presenta el paciente, siempre en el marco del protocolo establecido para cada problema de salud crónico. Los protocolos establecen que, en ningún caso, las enfermeras podrán modificar el principio activo o la marca del medicamento prescrito por el facultativo.
El objetivo de esta medida es la de aportar a las enfermeras los conocimientos necesarios para poder desarrollar una prescripción colaborativa con el médico sobre las patologías más prevalentes en la población, por ser aquellas cuyos tratamientos requieren de un seguimiento y de visitas frecuentes a los centros de salud, lo que incide, además, en una mayor seguridad y más beneficios para estos pacientes en tanto en cuanto supone un más fácil y ágil acceso a sus fármacos.
El seguimiento protocolizado de tratamientos farmacológicos individualizados por parte de las enfermeras será una práctica más en su trabajo, tanto en el ámbito de los cuidados generales como en los especializados. Previo al desarrollo de esta actividad, y tras realizar la formación necesaria para ello, las enfermeras tendrán que ser acreditadas por la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía.
Las enfermeras que, voluntariamente, se han formado en esta nueva competencia deben cumplir tres requisitos iniciales: tener experiencia en el proceso crónico relacionado con el protocolo colaborativo al que va a formase , haber realizado el programa formativo acreditado teórico-práctico específico y acreditar evidencias clínicas del buenas practicas relativa al protocolo de seguimiento farmacológico, por la Dirección General de Calidad, Investigación y Gestión del Conocimiento de la Consejería de Salud a través del Programa de Acreditación de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía.
De las 22 enfermeras que actualmente se encuentran en período de formación y acreditación en el protocolo de seguimiento para el tratamiento de la diabetes, 2 son de Almería, 1 de Cádiz, 3 de Córdoba, 2 de Granada, 4 de Jaén, 8 de Málaga y 2 de Sevilla. A lo largo del mes de mayo otras 20 enfermeras se formarán en seguimiento para la diabetes. El protocolo de seguimiento farmacológico individualizado para diabetes se encuentra publicado en la página del Servicio Andaluz de Salud siendo el primer documento de índole nacional de estas características.
El protocolo de colaboración en seguimiento protocolizado para el tratamiento farmacológico individualizado en anticoagulación oral se publicará próximamente, paso previo a la realización del programa formativo para la aplicación de este protocolo de trabajo.
Para final del año 2011 se esperan que más de un centenar de enfermeras estén dando respuesta a pacientes de patologías crónicas tan relevantes como pacientes paliativos en sedación domiciliaria, pacientes diabéticos tanto en el ámbito de especializada como de primaria, pacientes con riesgo cardiovascular en tratamiento con anticoagulación oral, hipertensión y/o hipercolesterolemia.
La prescripción colaborativa viene a sumarse a otras nuevas competencias que ya ejerce este colectivo desde septiembre de 2009, cuando comenzó la indicación enfermera en la comunidad.
La aprobación y el desarrollo de esta nueva competencia supone un nuevo impulso a la Estrategia de Cuidados en Andalucía desde que se aprobó el decreto correspondiente en Consejo de Gobierno en julio de 2009 y Andalucía se convirtió en la primera comunidad autónoma en regular la indicación enfermera.