Estando en plena temporada de cosecha de tomate me decido por hacer esta ensalada con tomates recolectados de mi propio huerto urbano y orgánico, justo cuando éste emanaba los aromas de los frutos del campo más cautivadores, cogí algunas variedades que estaban en plenitud de maduración y cuando esto sucede lo mejor es recoger y comer, es cuando hay que aprovechar la calidad del producto e interferir lo menos posible en su sabor, así que juntamos unos pocos ingredientes e pronto, una maravillosa y fresca ensalada, muy similar a la Caprese pero con productos cultivados y cosechados con mis propias manos, incluso la albahaca, una albahaca morada de hoja pequeña pero muy perfumada, aprovechando tamañas delicias de la tierra y ya que todo esfuerzo otorga recompensa, me dispongo a hacer esta sencilla pero deliciosa ensalada llena de complejidad de sabores debido a la variedad y variedades de los tomates con el perfume de la albahaca solo faltaba añadirle un queso y como no podía ser de otra manera le añado uno de mis quesos frescos favoritos e idóneo para ensaladas, una burrata, imagina una bola de mozzarella pero con el centro cremoso, casi líquido, cada bocado es una fiesta en tu boca. La burrata es un queso fresco italiano hecho de leche de vaca pasteurizada, hecho a mano y en forma de bolsa muy similar a la mozzarella pero mucho más cremoso, la más valorada es la IGP Burrata di Andria en la región de Puglia, donde tiene su origen y fue creada por Lorenzo Bianchini. Esta, para mi es una receta muy especial y quería compartirla para que la hagas con los tomates de tu preferencia, haz una selección cuidadosa, de eso dependerá la complejidad de sabores. Si quieres ser algo atrevido, reboza la burrata, fríela y tendrás una ensalada tibia de primer nivel, sabores mediterráneos por doquier, atrévete, no te arrepentirás.
RECETA Nº 193 - ENSALADA DE BURRATA, TOMATES Y ALBAHACA FRESCA
INGREDIENTES
- 150 gr queso burrata (1 unidad escurrida)
- 100 gr de tomates frescos variados (yo usé tomate melocotón, golden Jubilée, cuerno de los Andes, mucha miel y sungrape)
- 12-15 hojas de albahaca fresca
- 1 pzca sal en escamas
- 1 pzca pimienta negra recién molida
- 3 cs AOVE
PREPARACIÓN
1. Colocamos la burrata en el centro de nuestro plato.
2. Lavamos y escurridos bien nuestros tomates y los cortamos en gajos, los colocamos alrededor de la burrata.
3. Añadimos sal en escamas, pimienta negra recién molida y las hojas de albahaca fresca, si tienes albahaca de hoja ancha, rómpela con la mano y añádela por encima.
4. Terminamos rociando el aceite de oliva virgen extra y servimos, más fresco imposible.
Para obtener resultados verdaderamente sorprendentes, pide a tu proveedor de frutas y verduras que te venda variedades de tomate antiguo como el corazón de buey, cuerno de los Andes, pera amarilla, alguno de la variedad rosa, tigrella bicolor, green zebra, cherry verde, rojo o amarillo, dátil, calabaza, entre otros, o el San Marsano, aunque este último es ideal para salsas ya que es el tomate de uso tradicional para las salsas italianas como la famosa salsa Bolognesa, pídelos con toda confianza, descubrirás un mundo nuevo de sabores con cada variedad de tomate. Esta receta como digo es para una persona aunque la puedes compartir y comer algo más, si quieres hacer más raciones aumenta más de todo, eso sí, te recomiendo una burrata de este peso por persona.