En el colegio, en la clase de geografía nos preguntaban ¿qué es el viento? Y al unísono contestábamos con una entonación a modo de canción: el viento es el aire en movimiento…..pero a los malagueños, no nos enseñan en clase qué es el terral, ése viento del norte que nos azota durante varios días como una pesada lengua de fuego; aprendemos de nuestros mayores como sobrellevarlo.
Pues aunque parezca increíble ayer el verano llegó, se quedó y venció en Málaga; nos lo trajo el viento, conquistó el mercurio comenzando bajo la bandera del “terrá” a escalar el termómetro poquito a poquito, alcanzando más de 32º C. Un viento que es malagueño, tan malagueño o más que una biznaga, que un gazpachuelo o que un espeto de sardinas.
Cuando sopla el “terrá”, ese “caló” seco, sofocante, casi siempre racheado, levantisco e incluso aplomado, denso, que casi no nos deja respirar, nuestro cuerpo nos pide comidas ligeras, alimentos frescos y en la gastronomía andaluza y más concretamente en la malagueña hay donde elegir.
Ricas ensaladas, llenas de sabores refrescantes a huerta veraniega, al Valle del Guadalhorce, repleta de matices verdes, como la pipirrana, salpicón, porra, zoque o gazpacho. De muestra les dejo algunas de las que por tradición, suelo preparar en mi cocina.
EL SALPICON DE MARISCOS
PIPIRRANA DE PULPO
PIPIRRANA CON ARENCAS
SALPICON DE MEJILLONES
Hace tiempo que pensaba en qué puedo utilizar los garbanzos cocidos que por ser exagerada me suelen quedar cuando preparo puchero (receta aqui), que no fuese la clásica ropa vieja (en éste enlace tienen la receta).,que fuese un plato más veraniego, y vi la receta de mi amiga Margret hace unos dias una ensalada de garbanzos.
Ella es alemana, aunque hace años que vive en la Comunidad Valenciana y es la autora de un magnifico blog, con unas recetas muy bien presentadas, sana, sin añadidos químicos, elegante, fusionando la cocina española con la alemana. El nombre del blog es Cocinisima….
Los sufijos “isima e isimo” sirven para formar el grado superlativo de algunos adjetivos y según la Real Academia de la lengua Española, está referido a algo “muy grande y excelente en su línea”; les garantizo que la cocina de Margret, realmente merece ése sufijo….compruébenlo.
He preparado y disfrutado con algunas pequeñas variaciones la ensalada de Margret y que como buena andaluza yo llamaría: pipirrana de garbanzos o salpicón de garbanzos, ¿no les parece?.
¿Cómo la he hecho?
Ingredientes: Garbanzos cocidos, un pimiento rojo y otro amarillo (pimientos dulces baby), un pimiento verde pequeñito, un trocito de cebolla blanca dulce, tomates cherry (he usado kumato), aceitunas negras, aceitunas rellenas de anchoas, jengibre fresco, una pizca de azúcar morena, sal, dos cucharadas soperas de salsa de soja, dos de vinagre de vino y cuatro de aceite de oliva virgen extra (he usado de Riogordo, malagueño), unas hojas de cilantro fresco.
Los pasos a seguir:
Escurrir los garbanzos de forma que no les queden caldo (pueden usar garbanzos cocidos que suelen vender en tarros de cristal en cualquier supermercado). Picar los pimientos y las aceitunas rellenas en rodajas, la cebolla en trocitos pequeños y los tomatitos partirlos en cuatro y mezclarlos con los garbanzos. Añadir las aceitunas negras y preparar el aliño. En un cuenco echar la soja, el vinagre, la sal, el azúcar, por último el aceite y mezclar con una varilla de batir (o en su defecto con un colador pequeño) de forma que se emulsionen bien todos los componentes. Agregar a la ensalada el cilantro cortado y regar abundantemente con el aliño.
¡¡ Buen provecho, buen fin de semana y por favor, si pueden ya saben mi consejo…disfruten de Málaga !!