Ensalada de guacamole con bacalao, aliño de tomate y frutos secos

Hemos vuelto a la realidad,  a la rutina, después de unos días de excesos. Así que empezamos a preparar comidas mas ligeras, refrescantes y sabrosas. Esta ensalada puede ser perfectamente un entrante, la podemos servir templada o fría, de igual modo tendremos una ensalada de contrastes y texturas.
En esta ensalada se combinan los sabores dulces y salados, el crujiente de los frutos secos, con el frescor del tomate aliñado.
 
Ingredientes
Para 4 personas
-180 gr. de guacamole (pincha para ver receta)
-240 gr. de lomo de bacalao en su punto de sal
-240 gr. de lechugas varias (mezclum)
-2 tomates maduros
-Aceite de oliva y vinagre
-2 c/s de sésamo tostado
-4 c/s de miel
-4 c/s de vinagre de módena
-1 c/s de piñones
-1 c/s pasas sultanas
-4 tomates cherry
Elaboración:

Preparamos el aliño de tomate. Lavamos y cortamos los tomates quitándole las semillas, cortamos en brunoise y bañamos de aceite de oliva y vinagre. Reservamos.
Mezclamos el sésamo tostado con la miel y el vinagre de módena, emulsionamos y reservamos.
Ponemos el bacalao al fuego cubierto de agua con la piel hacia abajo y dejamos cocinar unos ocho minutos contando a partir de que empiece a hervir. Una vez cocinado retiramos del fuego, dejamos enfriar hasta que podemos manipularlo, le quitamos la piel y desmigajamos. Reservamos
Los tomates cherry es a modo de decoración, los partimos en cuatro rodajas.
Para emplatar la ensalada pondremos un aro sobre el plato dónde se va a servir la ensalada. En el centro pondremos una cucharada abundante de guacamole, sobre el guacamole pondremos el bacalao desmigajado, seguimos con las lechugas variadas aprentando un poco para que se compacten los tres ingredientes. Continuamos con una cucharada abundante de tomate aliñado y terminamos con el otro aliño de sésamo y miel. Pondremos los piñones y las pasas. Con cuidado retiramos el aro y decoramos con el tomate cherry.