Tocaba entrenamiento con el Club del Corredor y además nos iban a dejar para probar unos cuantos pulsómetros de la marca POLAR. En mi caso me tocó el V800, a priori y puesto en la muñeca “muy chulo”, pero había que darle caña.
Tras las fotos de rigor con la cartelería de Polar salimos desde el Kilometrín con rumbo a la Playa de Poniente con la idea de hacer un rodaje vivo de 45 minutos, pero sin pasarnos. Nada más empezar “la cosa se puso bien”, con el cuento de qué pulsaciones te marca, cómo va el pulsómetro tuyo… nos fuimos metiendo en ritmos sub 4:15, perfecto para mi talón.La verdad es que me encontraba bastante bien, íbamos hablando aunque con la lengua fuera y con ritmos sub 4 en muchos tramos pero sin mucho problema, el pulsómetro marcando 188 ppm. A la vuelta y ya a la altura del kilometrín decidí parar, ya había forzado el talón más de lo deseado y aunque no me molestaba me temía lo peor al día siguiente.Finalmente rodé 33 minutos 21 segundos con ritmo medio 4:33 recorriendo 7,3 kilómetros. El ritmo medio es engañoso ya que ahí están metidos los primeros 500 metros de trote desde casa al kilometrín por encima de 5:40 y los últimos 500 metros para terminar, también por encima de 5:40. Terminé ya sin crono con otros 500 metros de vuelta a casa muy suaves y una buena sesión de estiramientos.El pulsómetro hay que reconocer que aparte de estar muy bien estéticamente es muy cómodo y además proporciona muchísima información y fácil de seguir. Luego nos estuvieron enseñando como se podía ver y analizar la información de la carrera en un dispositivo móvil y la verdad es que es una gozada. Lo peor el precio…Hoy viernes tocará trote tranquilo de 10 k y el fin de semana como siempre también PROMETO ENTRENAR.