Entrevista a Fernando Romero

Por Arquitectitis
Aquitectitis tuvo ayer el honor de entrevistar al arquitecto mejicano con más proyección internacional del momento, Fernando Romero. Aprovechando su paso por Madrid de camino a la feria del libro de Frankfurt, nos presentó su nuevo libro, Simplexity, un catálogo de las obras desarrolladas por su estudio LAR, en los últimos diez años.

Los proyectos se ordenan de más orgánicos a más racionales. Y de entre ellos destacó, por ejemplo, el concurso para el Arco del Bicentenario, un anillo cuya base estructural funciona a la vez como plaza pública. También habló de uno de sus últimos proyectos, el museo Soumaya, un edificio vertical que emerge de la plaza, como si de un volcán se tratara, para contener arte. "Méjico es una potencia cultural por explotar", afirmó.En él quiere romper con lo clásico, construyendo un edificio asimétrico, reflejo tanto del programa (exposición de arte del siglo XII al XXI), como de la orientación. Su fachada está formada por una doble capa de 6000 hexágonos cuyas dimensionas varían desde los 46 cm a los 1,20 metros. Así se conforma la piel del edificio, que se adapta a él como un traje hecho a medida.La estructura tubular se lleva al perímetro permitiendo plantas diáfanas, y una respuesta adecuada frente a los sismos. Cada planta es diferente a la anterior, gracias a lo cual, queda reflejada la diversidad de la colección que exhibirá.En la planta superior se expondrá la segunda colección más grande de Rodin del mundo, que quedará iluminada cenitalmente a través de la cúpula que la cubre.Arquitectitis le preguntó sobre el proceso de proyecto en su estudio, del cual nos contó que en su oficina se funciona con una estructura muy horizontal, con gente muy joven trabajando, y donde él plantea un concepto de proyecto, los jóvenes lo desarrollan y, después de revisarlo entre todos, y tras comprobar que todos están entusiasmados con la idea, empiezan a trabar en equipo para sacarlo adelante.Para Fernando Romero un proyecto tiene que ser reflejo de su época, hay que utilizar tecnologías de vanguardia para que los edificios sean más técnicos y respondan a las preocupaciones de hoy día, como es el cambio climático, las necesidades de la economía, etc.Pero la parte para nosotras más interesante, llegó cuando preguntamos a Fernando Romero sobre su proyecto Don Casa."Después de trabajar en la punta de la pirámide, en edificios icónicos, tipo el museo Soumaya, pensamos que sería interesante ahora trabajar en la base de la pirámide, con la gente que se autoconstruye las casas, y que están en las favelas mejicanas, en el perímetro de las ciudades. Ahí está el mayor reto", dijo F. Romero.Apoyados por Modular, ingeniería que ayuda la gente más necesitada a hacer casas dignas, van a ofrecer en una primera fase planos con soluciones higiénicas, seguras, y bien ventiladas, que ellos mismos se autoconstruirán.Don casa, dibujará soluciones integrales, pensando en utilizar siempre los materiales que ellos ya utilizan, como el bloque de cemento. En una segunda fase se les ayudarán con recursos financieros, microcréditos, para que compren materiales, y cuyos intereses repercutirán en ellos mismos, financiando escuelas, centros de salud, etc. En cada colonia popular habrá un Doctor Casa, miembro de LAR, que gestionará la casa de materiales."Don Casa es un micronegocio socialmente responsable, vinculado a ONGs, que trata de dignificar la forma de vida de la gente más necesitada" dijo Fernando Romero.Es un proyecto en fase inicial que ya ha empezado a funcionar, y que ha puesto a la mitad del estudio LAR a trabajar en proyectos icónicos, y a la otra mitad en proyectos de ayuda al desarrollo.Desde luego una preciosa iniciativa que dice mucho de la personalidad de este joven arquitecto, comprometido con el tiempo en el que vivimos, por un lado tecnológico y moderno, pero por otro lado con grandes diferncias sociales y pobreza que ninguno tenemos que olvidar.Muchas gracias Fernando por tu tiempo y tu amabilidad.