Kimi Raikkonen no se excede en su satisfacción, como ya nos tiene acostumbrados. Aunque él y Romain Grosjean han conseguido la segunda y tercera posiciones, el finlandés ha aquejado subviraje en su E21, por lo que la necesidad de cuidar sus neumáticos ha limitado su ritmo: "Ha ido bien. Quiero decir, desde el principio he perdido una posición en la primera vuelta, no, en la primera recta, pero luego ha habido un accidente, así que la he recuperado. El coche ha subvirado demasiado durante todo el fin de semana, incluso hoy, así que he tenido que intentar cuidar los neumáticos delanteros y esa ha sido la limitación que he tenido en cuánto podía empujar. Luego nos hemos quedado atrapados en mitad del tráfico tras las paradas en boxes, por lo que decidimos anticipar la parada, lo cual ha sido un buen movimiento. El coche de seguridad nos ha ayudado un poco, pero teníamos la velocidad y hemos podido tirar hasta el final. Por ello, aún sin safety car podríamos haber seguido hasta el final y mantener la posición de podio. Por tanto, ha sido bueno, pero no ideal".
De hecho, el que en 2014 será piloto Ferrari admite que difícilmente el resultado podría haber sido distinto: el ritmo del RB9 de Red Bull está un paso por delante del suyo y el trazado coreano no facilita los adelantamientos: "No, quiero decir, pongámoslo de esta manera: incluso si hubiéramos arrancado detrás de él, aún así no tenemos su velocidad. No estamos lejos en carrera con un poco de los neumáticos, pero quiero decir que es muy difícil adelantar si no eres masivamente más rápido. Por tanto, creo que lo que hemos hecho hoy está bastante bien".
Romain Grosjean, por su parte, declara ligeramente resignado que hoy su ritmo era superior al de su compañero de equipo, pero el equipo es claro a ese respecto: no luchar. Tras perder la posición con Kimi, una bandera amarilla ha impedido al francés activar el DRS y su compañero se ha escapado definitivamente: "Nuestra radio es bastante mala, tengo que decirlo. Yo tampoco escucho gran parte de las conversaciones. Cometí un error, Kimi pudo adelantarme y luego, desafortunadamente, había una bandera amarilla en la curva tres, así que no he podido recuperar mi posición. Hoy he sido más rápido, pero tenemos la regla de no luchar".
Vettel, por su parte, nos explica cuál ha sido su reacción al encontrar en pista un coche que no era el safety car: "Vi... creo que era un BMW, no perdón, parecía un BMW. Creo que era un Hyundai o un Kia SUV. ¿Quieres la matrícula? No era el de Bernd Maylander, así que no era el safety car. Eso lo vi. Luego el equipo ha dicho 'bandera amarilla', no estaba claro que eso fuera el coche de seguridad, pero luego la pantalla de Safety car estaba parpadeando y tras eso he visto que había otro coche en la pista. No he sabido qué era el incidente hasta que he visto el humo. Obviamente, luego me han dicho que había habido un accidente, así que he sabido que no era el safety car".
77 puntos separan a Fernando Alonso de Sebastian Vettel en el Mundial de Pilotos, una ventaja que permitiría al alemán proclamarse cuádruple campeón del mundo en el próximo Gran Premio de Japón. Vettel es consciente de ello, pero prefiere focalizar sus pensamientos en el presente y no avanzar acontecimentos: "Intento no pensar mucho en ello, para ser sincero. Trato de concentrarme en el presente. Creo que obviaente tenemos una oportunidad increíble, como hace dos años. No obstante, aún quedan muchos puntos que conseguir, aunque luce bien para nosotros. Creo que Fernando aún tiene una oportunidad, así que tenemos que mantenernos en lo más alto de nuestro juego, creo que lo he dicho en el podio, simplemente estamos pasando un buen rato".
Los neumáticos han sido una de las preocupaciones generales en esta carrera, donde hemos visto a Sergio Pérez sufriendo el reventón de uno de sus neumáticos tras bloquear en la recta. Red Bull también ha observado con temor la degradación del neumático delantero derecho del RB9 de Vettel, que finalmente ha resistido y no hemos rememorado el episodio de la temporada pasada: "Se sabe que en esta pista el límite es el neumático delantero derecho. Lo vimos en años previos y básicamente es bueno tener al equipo en la radio para alertarte, porque obviamente ves qué está pasando, el neumático gana graining rápidamente y luego se estabiliza. Pero luego, cuando el graining se detiene significa que ya no queda nada y es bastante peligroso porque es como tener un gran bloqueo. Tienes un plano, que podría acabar con una parada anticipada o un pinchazo, así que sí, estaban bastante preocupados, parecido al año pasado. Creía que lo tenía más o menos bajo control, pero obviamente es bueno comunicarlo".
De cara al próximo Gran Premio de Japón, el tricampeón de Red Bull lo espera con ganas y declara que es su trazado favorito: "Creo que es la mejor pista del mundo, para ser sincero. Los aficionados están locos, completamente locos en el sentido positivo, así que espero Japón con muchas ganas".
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