La epicondilitis se presente como una patología frecuente entre la 3º y la 5º década. La frecuencia en función del sexo es indiferente.
El dolor se presenta de manera progresiva y en muy raras ocasiones se aparece como algo brusco o repentino. El dolor se puede irradiar hacia el antebrazo o las cervicales. El dolor aparece con ciertos movimientos como el revés en tenis, servir los alimentos ó dar la mano entre otros. No se observa ni derrames articulares ni limitación de la prono-supinación. No hay dolor en la interlinea articular. Las pruebas radiológicas pueden mostrar calcificaciones lineales en la zona de la inserción de los tendones. Tratamiento: Este se basa en la fisioterapia y el reposo de la práctica deportiva. El problema que suele presentar esta patología son las recidivas.
Epicondilalgias:
- Epicondilalgias de origen articular: En esta patología el dolor se localiza en la interlinea articular. Suele aparecer un derrame articular visible mediante el abombamiento de la capsula en el canal olecraniano. A nivel funcional presenta una limitación en la flexión o en la extensión.
- Epicondilalgia de origen cervical: Si el paciente presenta dolor irradiado a lo largo del todo el miembro superior abarcando el territorio de c5-c6 debemos valorar las cervicales. Tratamiento: De primera opción intentaremos manipular las cervicales y en caso de que esto no funcione se tratara como una neuralgia cervicobraquial.
- Epicondilalgias de origen en el canal: Consiste en la compresión de una rama del nervio radial (nervio interóseo posterior) a su paso por el arco de Frohse. El paciente presenta dolor intenso (que aumenta por la noche) y parestesias. Este dolor es localizado en la parte posterior del antebrazo. Tratamiento: El tratamiento es conservador (fisioterapia) y en muy pocos casos quirúrgica.