En dicha investigación, dirigida por el psicólogo Henning Teismann, se ha medido la actividad neuronal en el córtex auditivo de un total de 13 personas, de entre 20 y 30 años, de los cuales había un grupo que durante años habían escuchado música a un volumen muy elevado.
Así, una investigacuión de la Universidad de Friburgo del año 2009 detectó que la música escuchada por auriculares a partir de 85 decibelios puede provocar severos daños en el sistema auditivo.