España: El 30% de las jóvenes que tuvo sexo de riesgo había bebido

Por Fat
Viernes por la noche. Chica conoce chico en un bar de copas. Flirtean y tienen eso que llaman 'química'. Ella ha bebido. ¿Qué posibilidades hay de que acaben en la cama y no usen protección? La respuesta la tiene el 'Estudio Ring 2: Sexo, alcohol y anticoncepción entre las jóvenes de España', que se ha presentado esta mañana. Un tercio (38,4%) de las jóvenes españolas entre los 19 y los 29 años reconoce que ha mantenido en alguna ocasión relaciones sexuales sin utilizar anticonceptivos. El 30% de las que incurrieron en esta práctica había consumido alcohol previamente.
El cóctel alcohol y sexo lo combinan cada fin de semana las jóvenes que salen de marcha. No por desconocimiento, sino más bien por desinhibición y por inconsciencia. Es, como afirman ellas en este trabajo del Círculo de Estudio en Anticoncepción (un grupo de once ginecólogos independientes constituido en 2006), la 'locura' de una noche.
Los datos proceden de las encuestas realizadas por Sigma Dos entre el 15 de marzo y el 8 de abril de este año a 3.163 mujeres. El 42% de las participantes confiesa que "va de cañas o copas todos o casi todos los fines de semana" y seis de cada 10 considera que el consumo de alcohol elimina entre "bastante" y "mucho" las barreras para mantener relaciones sexuales.
"Como se ve en el estudio, un porcentaje considerable de jóvenes que consumen alcohol mantienen, debido a su influencia, relaciones sexuales sin métodos anticonceptivos, lo que aumenta el riesgo de embarazo no deseado -entre otras consecuencias-. En este sentido se podría decir que existe una relación entre el consumo de alcohol y los embarazos no deseados", destaca la doctora Esther de la Viuda, ginecóloga del Hospital Universitario de Guadalajara y presidenta de la Sociedad Española de Contracepción.
Por grupos de edad, las mujeres entre 24 y 26 años son quienes más han consumido alcohol antes de tener sexo sin protección (32,1%) seguidas por las jóvenes entre 18 y 20 años (32%).
Iñaki Lete, del Servicio de Ginecología del Hospital General de Requena (Valencia), matiza que "normalmente un 80% de las mujeres usa anticonceptivos eficaces". Sin embargo, como el preservativo es el más utilizado (por el 45% de las jóvenes) "hay que tener en cuenta que en circunstancias de abuso de alcohol puede ser mal utilizado o, directamente, que se olviden de usarlo". Tras el condón, los métodos más utilizados por las españolas son la píldora (29%), el anillo vaginal (7,5%) y el parche semanal (1%), entre otros.
-Olvidos nocturnos
Los especialistas señalan que en la relación entre sexo, alcohol y anticoncepción pueden pasar dos cosas fundamentales: primero, si ellas toman muchas copas pueden olvidarse de cosas que tienen que hacer como, por ejemplo, usar preservativo. En segundo lugar, pueden vomitar y, de esa manera eliminar la eficacia de la píldora anticonceptiva, si es que la están tomando.
La influencia del alcohol en el sexo es algo que la mayoría de las jóvenes tiene claro. No así su influencia sobre los métodos anticonceptivos. Un 38% de las usuarias de la píldora afirma que no se ha planteado nunca que "si se emborracha y vomita podría correr el riesgo de un embarazo no deseado" -aunque es algo que figura en el prospecto del fármaco-. Además, el 36% de quienes toman la píldora reconoce que "esta posibilidad podría haberles ocurrido a ellas".
Tanto la doctora De la Viuda como el doctor Lete recuerdan que existen otros métodos hormonales -como el anillo o el parche- que no pierden eficacia por los efectos nocivos del alcohol ni por los olvidos provocados por los estados de embriaguez.
-Satisfacción
No obstante, las cifras igual pueden llevar a engaño y hacer pensar que las mujeres buscan sexo cuando salen de marcha y lo cierto es que para el 77,6% de ellas "el sexo es importante, pero no prioritario". De hecho, les aportan más satisfacciones las amistades, la vida familiar, la relación de pareja estable, las actividades de ocio y el estado de salud -por este orden- que el sexo. La vida sexual sólo se considera más satisfactorio que los estudios, el trabajo y que la situación económica.
**Publicado en "El Mundo"