El director del Centro Nacional de Ecografía en Ginecología y Obstetricia (Cenego), Luis Mercé Alberto, ha afirmado que adelantar los partos que todavía no están a término, no sólo es algo "desaconsejable sino que está absolutamente contraindicado porque pone en riesgo la salud del bebé".
Mercé se ha referido a los casos de algunas mujeres que quieren adelantar el parto para cobrar el cheque bebé de 2.500 euros que dejará de ser efectivo a partir del 1 de enero y al respecto ha adelantado que, si se trata de un parto que no está a término, las repercusiones pueden ser negativas para el bebé y para la familia, y al final el daño "suele ser más caro que el cheque bebé".
"Lo peor sería adelantar partos que no estuviesen a término, es decir, que el niño no estuviese lo suficientemente maduro o bien para respirar o bien para comer. Esto plantea un problema perinatal porque hay que ayudar al niño desde el punto de vista de utilizar incubadora o medios especiales que aumentan tremendamente el gasto y ponen en riesgo la salud del recién nacido. Por tanto estaría totalmente en estos casos no desaconsejado, aquí está absolutamente contraindicado", ha afirmado el director de Cenego.
Respecto a la experiencia que tienen en el centro, Mercé ha aseverado que "ninguna de las embarazadas" que acuden a hacerse una ecografía "comentan en absoluto sobre su intención de adelantarse el parto", si bien no rechaza que ese movimiento exista, sobre todo en los "blogs de Internet" donde sí se habla de la posibilidad de adelantar el alumbramiento.
En defensa de la sanidad privada
Mercé ha querido diferenciar los casos en los que se pretende adelantar el parto por motivos económicos de las inducciones que se van a realizar "por motivos médicos" estas últimas semanas de diciembre, y que pueden ponerse en tela de juicio. Al respecto, ha aclarado que las inducciones que sean necesarias se llevarán a cabo "lógicamente tanto en la medicina pública como en la privada" y, por ello, "nada tiene que ver con el cheque bebé".
Entiende "perfectamente" que haya gente con mala situación económica que requiera de esa prestación, pero cree que no es un problema que se solucione "con una inducción de parto, sino a través de una serie de medidas sociales que el Gobierno debería procurar en estos casos.
El director de Cenego también ha salido en defensa de la medicina privada y ha criticado algunas voces que apuntan a que en este campo se da una cierta "connivencia" entre médicos y pacientes "para llegar a inducir un parto y poder recuperar ese cheque bebé", una idea que rechaza por completo. "Los ginecólogos españoles son unos profesionales muy altamente cualificados para realizar una inducción tanto en medicina pública como privada o terminar un parto con los motivos médicos muy seguros" y no debido a otros aspectos como puede ser "una cierta cantidad de dinero que se dé de ayuda", sentencia.
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