Espirulina, tan pequeña y tan beneficiosa!

Por Angelesalquimia

La Espirulina es un auténtico regalo de la naturaleza, se le considera el alimento natural vivo más antiguo que existe y pertenece al grupo de los superalimentos. Es una microalga unicelular con forma de espiral que tiene un color verde azulado principalmente por su altísimo contenido en clorofila.

Es muy rica en proteínas (hasta el 70% de su composición), de mejor calidad y más fáciles de digerir que otras proteínas tanto animales como vegetales y nos aporta en una proporción perfectamente equilibrada aminoácidos esenciales que no pueden encontrarse en otros alimentos y que forman la arquitectura del cuerpo humano.

Respecto a los minerales, es fuente de yodo, potasio, zinc, calcio, hierro, fósforo, magnesio, selenio etc. Es por esto muy eficaz en casos de astenia, anemia, desmineralización, fatiga, convalecencias o desnutrición porque ayuda a recuperar la forma física, fomenta el rendimiento intelectual y es además una buena fuente de proteínas para los músculos.

Contiene vitaminas, sobre todo vitamina E y A en forma de betacarotenos (diez veces más que las zanahorias) por lo que ayuda a mantener una buena salud ocular. También contiene el complejo de vitaminas B completo; este complejo actúa en multitud de procesos orgánicos como la regeneración celular, el buen funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso etc., destaca sobre todo la cantidad que contiene de B12 y ácido fólico.

La clorofila que contiene ayuda a aliviar el estreñimiento además de ser muy eficaz para la eliminación de metales pesados y otras toxinas. En general, la espirulina está muy recomendada para regenerar la flora intestinal.

Está indicado en terapia anti-envejecimiento, porque aumenta la resistencia del organismo, retrasa el envejecimiento de los tejidos y además regenera la piel y combate la celulitis, arrugas, estrías, flacidez o piel seca.

En la menopausia una suplementación adecuada de espirulina ayuda a mantener una buena salud ósea por su aporte de calcio y magnesio.

Tiene efecto inhibidor del apetito porque la fenilalanina que contiene actúa sobre el hipotálamo enviándole un mensaje de saciedad y esta propiedad se ve reforzada por su alto contenido en proteínas y mucílagos. También ayudan a esta sensación los carbohidratos complejos de lenta asimilación que contiene ya que mantiene un nivel adecuado de azúcar en sangre evitando así los ataques de hambre. Para conseguir el efecto saciante, mejor tomarla una hora antes de la comida con un buen vaso de agua o entre comidas.
Tonifica ligeramente la tiroides, aunque en menor grado que otras algas, por lo que siguiendo las indicaciones de un especialista puede tomarse en casos de hipotiroidismo.

También es una buena fuente de ácidos grasos poliinsaturados y esenciales como el omega 6 que tiene efecto antiinflamatorio y es esencial para una buena salud de los sistemas cardio-circulatorio (tratamiento del coleseterol, previene la formación de coágulos) y cerebral. Y es además estimulante del sistema inmune.

Otra de las buenas noticias respecto a la espirulina es que no contiene grasas perjudiciales ni prácticamente calorías.

La dosis recomendada para adultos es mínimo de 3 gramos al día, y si la consumimos a diario nuestra salud mejorará significativamente. También los niños pueden consumirla, sobre todo en períodos de sobre-esfuerzo intelectual y físico y su dosis sería de 1,5 a 3 gramos al día.

Se comercializa de varias maneras, en escamas, en cápsulas y en pastillas; en esta presentación tenemos que mirar bien el contenido de celulosa que los fabricantes utilizan para amalgamar las algas.

¿A que viendo lo buena que es dan ganas de empezar a tomarla?