Las famosas galletas de jengibre no pueden faltar nunca en casa por Navidad, de hecho son de las primeras que hago siempre, porque están más ricas cuando llevan hechas unos días, además, aguantan muchísimo tiempo en buenas condiciones si se guardan en una lata, o en un taper en la nevera. Este año he hecho una receta nueva de una revista australiana, es muy sencilla y han resultado muy ricas.
Ingredientes:
350 g harina y un poquito más para espolvorear
1 cucharadita de bicarbonato de soda2 cucharaditas de jengibre100 g de mantequilla
175 g de azúcar moreno
3 cucharadas de miel de caña
1 huevo mediano
Elaboración:
Tamizamos la harina con el bicarbonato y el jengibre.
Mezclamos con los dedos la harina y la mantequilla hasta que tenga apariencia de migas.
Calentamos ligeramente la melaza, unos segundos en el microondas o al baño maría.
Batimos el huevo con el azúcar y le mezclamos la melaza, esta mezcla la añadimos a las migas de harina y mantequilla. Removemos con una cuchara de madera y luego amasamos con las manos hasta que nos quede una masa suave. Envolvemos en un papel film y dejamos 1 hora en la nevera.
Precalentamos el horno a 180ºC .
Preparamos las bandejas de hornear cubriéndolas con silpat o un papel del horno
Sobre una superficie de trabajo extendemos la masa con un espesor de 1cm y 1/2, cortamos en forma de estrellas, con un cortador en forma de estrella pequeñito, le retiramos el centro y colocamos sobre las bandeja.
Las introducimos en el horno caliente y las dejamos 12-15 minutos o hasta que estén doradas.
Dejamos enfriar 30 minutos, espolvoreamos con azúcar glas... y listas!