También conocido como psicopatía alimentaria, el trastorno alimenticio consiste en la alteración de los hábitos que una persona realiza al comer. ¿Tienes un buen hábito al comer?
Este se presenta cuando una persona no recibe los nutrientes suficientes que su cuerpo necesita de acuerdo a su edad, estatura, y ritmo de vida.
Lo anterior lleva al desarrollo de enfermedades causadas por la ansiedad y por una preocupación excesiva con relación al peso corporal y al aspecto físico. Los trastornos alimenticios se presentan mayormente en las mujeres, pero en la actualidad también se manifiestan en los jóvenes hombres que quieren tener un mejor cuerpo.
La bulimia y anorexia son los principales y más comunes trastornos alimenticios. ¿Sabes de que se tratan estos trastornos alimenticios?
La anorexia es la resistencia que una persona presenta a comer, motivada por la preocupación de su apariencia física. Un individuo anoréxico deja de comer para bajar de peso o para no ganarlo; su obsesión por mantenerse delgado va al extremo.
La bulimia actúa en sentido contrario a la anorexia y es cuando una persona come abundantemente y sin limite, seguido de un gran sentimiento de culpa. La persona se provoca así misma la expulsión del alimento por medio del vómito, o por medio de sustancias como laxantes, diuréticos, enemas; realizando ejercicio excesivo o ayuno prolongado.
También se da la anorexia nerviosa que es la falta de apetito, donde las personas no tienen deseo de comer. Las consecuencias de la anorexia y la bulimia pueden ser fatales si no se controlan a tiempo.
Las consecuencias de la anorexia y la bulimia pueden ser fatales si no se controlan a tiempo. También puede sufrir de depresión, sentimiento de frío en el cuerpo, huesos frágiles que se rompen fácilmente, debilidad muscular y hasta la muerte.
Cuando las personas vomitan, el ácido del estómago disuelve el esmalte de los dientes y la cara se hincha debido al agrandamiento de las glándulas salivares. El vomitar produce latidos cardiacos irregulares, daño renal y convulsiones epilépticas.
El consumo de laxantes puede producir lesiones irreversibles en los músculos intestinales.
Los factores que hacen que una persona se vuelva anoréxica o bulímica son:
• La baja autoestima y poca seguridad en sí mismo.
• Las comparaciones constantes de amigos y familiares.
• La presión de los medios de comunicación con relación a la moda y la “belleza”.
• El miedo a tener sobrepeso.
Todo eso hace que las personas pierdan el sentido de la realidad y pongan en riesgo sus vidas.
Existen otros trastornos alimenticios como la ortorexia que es la obsesión por la “comida sana”. Y la permarexia que es le miedo a los alimentos.
Los trastornos alimenticios se pueden tratar con asistencia psicológica, un tratamiento médico y con el apoyo de la familia o personas allegadas.
Fuente: Telemundo