Bajo el título ‘Pandemia y liderazgo femenino, una historia de resiliencia’, se ha celebrado el décimo desayuno ODS organizado por Mediapost, para continuar analizando los 17 Objetivos para el Desarrollo Sostenible (ODS) marcados por la ONU. En esta ocasión, el desayuno ha hecho alusión al “ODS5: Igualdad de género”, de actualidad con la celebración del Día Internacional de la Mujer a la vuelta de la esquina. Ana Góngora, responsable global de Mediapost; Ana Vázquez, responsable del programa Yo, jefa para el impulso del liderazgo femenino; Inmaculada Blázquez, socia fundadora y directora general de Osprel, y María González Picatoste, responsable de Alianzas e Inversión en el Alto Comisionado para España Nación Emprendedora han debatido sobre cómo ha influido e influirá la pandemia provocada por el coronavirus a directivas, jefas y emprendedoras. El desayuno ha comenzado con la presentación de las principales conclusiones del estudio ‘Liderazgo femenino y Covid-19: perspectivas postpandemia’ realizado por la agencia de comunicación Trescom al amparo de su programa Yo, jefa. Ana Vázquez, responsable de esta iniciativa, ha afirmado que la conclusión general del estudio es que “las jefas han sido muy resilientes durante esta pandemia, han sabido reinventarse, actuar, tomar decisiones y no esperar a que todo pase”. De hecho, según este estudio, la mitad de las jefas españolas ha tenido que diversificar o reinventar su modelo de negocio para encontrar nuevas oportunidades. Además, un 37% de las encuestadas considera que habrá incremento de la demanda de sus productos y/o servicios de hasta un 15% en los próximos 6 meses. A la pregunta de cómo han conseguido seguir adelante con sus negocios en plena pandemia, Ana Vázquez ha señalado que ha habido dos factores claves: el teletrabajo y la digitalización. El haber sabido adaptarse a esas dos importantes variables se traduce en que un 55% de las directivas y emprendedoras no prevea hacer ajustes en sus plantillas durante este primer semestre de 2021. El coronavirus ha hecho que se instaure el teletrabajo como la única opción posible para seguir adelante con la actividad empresarial en una gran mayoría de casos. “Aunque para el 88% de jefas este cambio ha sido positivo por la flexibilidad que ha aportado, existe un 12% que no ve que tenga un valor añadido para el desempeño del trabajo y, en ocasiones, es más difícil separar la vida personal de la profesional”, reconoce la responsable de la iniciativa Yo, jefa. Según el estudio, 1 de cada 4 directivas españolas considera que el coronavirus empeorará el acceso de las mujeres a los cargos directicos y un 51% afirma que, con coronavirus o sin él, el liderazgo femenino aún tiene mucho camino por recorrer. Tras la presentación del estudio, ha tomado la palabra María González Picatoste, responsable de Alianzas e Inversión en el Alto Comisionado para España Nación Emprendedora, quien ha asegurado que "existe una lucha global por atraer el mejor talento y que, sin embargo, nadie pone el foco en el talento femenino ni ofrece alternativas atractivas para ellas. España se encuentra en una posición muy ventajosa en esta situación, porque en materia de igualdad -si nos comparamos con otros países- creo que estamos muy avanzados". Para Inmaculada Blázquez, socia fundadora y directora general de Osprel, “cualquier medida que se adopte en el momento de promocionar las ideas femeninas a la hora de invertir o de emprender son necesarias porque no se puede prescindir del 50% del talento”. Durante el debate, Ana Vázquez ha recordado que España está por encima de la media europea en igualdad (con una puntuación de 72 sobre 100), sin embargo, este avance sigue siendo muy lento. En este sentido, María García Picatoste ha reconocido que el germen empresarial de nuestro país puede ayudar a avanzar, pero que “el mayor problema es que la gente no ve el problema o no quiere verlo y se debe trabajar para romper esta dinámica y pensar a lo grande, con medidas que ataquen el problema de raíz”. Por su parte, Ana Góngora, responsable global de Mediapost, ha reconocido que para que haya igualdad debe haber “una igualdad real de oportunidades. Oportunidades que deben percibirse de forma positiva a través de los referentes familiares, sociales y educativos. Es importantísimo que desde muy pequeños se trabaje la autonomía, la competencia, etc. de niños y niñas y que aprendan a superar las barreras”.
Fuente Comunicae