Con motivo de la Semana del Orgullo Gay, la Asociación Madrid Positivo, dispuso una unidad móvil en la Plaza Vázquez de Mella destinada a realizar la prueba del VIH así como proporcionar información sobre el virus. Entre el 30 de Junio y el 2 de Julio, más de 1.500 personas fueron atendidas por la asociación, se repartieron más de 7.000 folletos informativos y cerca de 8.000 preservativos.
De las 203 personas que se realizaron voluntariamente la prueba rápida del VIH, se detectaron 6 positivos que fueron derivados a un centro sanitario para repetir el test y confirmar que no se trate de un “falso positivo”. En palabras del Doctor Jorge Gutiérrez, Presidente de Madrid Positivo “la campaña ha sido un éxito gracias a la buena respuesta de la comunidad. Hemos informado a más de 1.500 personas sobre cómo protegerse contra el virus además de concienciarles de la necesidad de hacerse la prueba periódicamente”.
La elevadísima demanda de información así cómo el interés por realizarse la prueba rápida del VIH ponen de manifiesto la urgente necesidad de continuar desarrollando campañas dirigidas a la población. Según Jorge Gutiérrez, “los resultados que hemos conseguido demuestran que debemos estar presentes en la calle para ofrecer de forma anónima y gratuita el test de detección del VIH además de información didáctica para controlar nuevas infecciones”.
Desde el 2005 Madrid Positivo promueve, de forma pionera en nuestro país, un innovador programa de prevención y asistencia del VIH/SIDA que consiste en hacer, de forma anónima, la prueba de detección precoz del VIH. Con la realización de esta prueba se conoce el resultado en un tiempo máximo de 20 minutos, evitando así posibles contagios. Además, al realizarlas en la calle, facilita mucho la accesibilidad, sobretodo de los jóvenes, que posiblemente no se someterían a ella si tuviesen que acudir a un centro especializado.
Son muchos los expertos y los estudios que inciden en la importancia del diagnóstico precoz del VIH para un mejor seguimiento de las terapias antirretrovirales. Tal como se demostró durante el congreso anual de SEISIDA que tuvo lugar el pasado mes en Santiago de Compostela, el diagnóstico tardío tiene consecuencias negativas tanto individuales como colectivas. Primero para el paciente, porque se diagnostica cuando la enfermedad está más avanzada y el deterioro ha sido mayor, pero también para la sociedad, porque al desconocer su situación aumentan las probabilidades de transmisión.
Es preciso mejorar la capacidad de diagnosticar precozmente a las personas infectadas por el VIH, ampliando la accesibilidad a las pruebas diagnósticas, usando tests rápidos y normalizándola. De esta forma se cribará la mayor proporción posible de la población vulnerable que haya tenido prácticas de riesgo. En este contexto es evidente que campañas como la de Madrid Positivo son muy necesarias en la lucha para detener el VIH.