Todos hemos escuchado la palabra “estrés” y más de alguna vez la hemos utilizado para definir un estado emocional en el cual nos encontramos. Ahora bien, la pregunta es ¿Por qué nos estresamos?
Estudios universitarios y médicos expertos en el tema sugieren que el 70% de las molestias que sentimos por el estrés, se deben a factores naturales, como por ejemplo, la mala alimentación, la falta de ejercicio, y la falta de descanso o sueño. Sin embargo, existen otros factores llamados “ambientales” que también contribuyen a esta situación y provocan malestar. Listamos algunos de ellos:
- El trabajo: es un generador de estrés para el individuo porque el ambiente laboral genera muchas tensiones y conflictos, y en general, cuando no se llenan las expectativas en cuanto a crecimiento personal, profesional y económico existe desmotivación y frustración que afectan el estado anímico y físico.
- El desempleo: por otro lado, cuando se sufre desempleo los ingresos económicos son bastante escasos y esto produce preocupación, y margina a los individuos por la falta de poder adquisitivo.
- La violencia: una de las principales causas que producen estrés, es la violencia. La violencia puede ser física, psicológica, sexual, y la causada por la delincuencia común en una sociedad.
- El tránsito: este es un problema que se da comúnmente en las ciudades con un gran flujo de vehículos y las grandes metrópolis, especialmente aquellas que no proveen de soluciones alternas al tema de transporte.
- El ruido: éste se produce por ondas generadas por presión, y se ha comprobado que al sobrepasar los 80 decibles (el sonido de un tren), resulta bastante molesto e incómodo. El ruido que produce el tránsito en una ciudad se estima que asciende a los 90 decibeles.
Aunque es difícil darle solución a la mayoría de estas situaciones, pues son ambientales, es necesario buscar ayuda para combatir sus efectos. Cuando la persona cree que es “víctima” de estas situaciones, menos buscará ayuda, por ello es importante estar consciente no solo del problema, sino de la necesidad de pedir ayuda y consultar a un médico que pueda proporcionar soluciones, tratamientos, consejos, etc, que puedan ayudar a lidiar con estos problemas que generan estrés en la vida diaria.