Hoy quiero hablaros de dos papás, uno veterano y otro reciente.
El veterano es, por supuesto, mi padre; ahora abuelo. Estas últimas semanas he estado navegando por la red buscando regalos para el día del padre y me he encontrado con muchas láminas con mensajes (al parecer están ahora de moda) y sin duda la frase que más me ha gustado para expresar lo que siento hacia mi padre, ahora que soy madre, es esta: "Lo único mejor que tú seas mi padre es que eres el abuelo de Paula".
Aunque mi padre trabajaba de sol a sol para mantener nuestra familia numerosa, no tengo la sensación de haber pasado poco tiempo con él, más bien lo contrario: Nos llevaba al cole, hacía los bocatas de nocilla para el recreo, nos enseñaba a limpiarnos los zapatos, nos hacía sus panes con sobrasada y queso al horno para cenar, nos llevaba a jugar al fútbol o al tenis (menudos partidos echábamos), a la piscina en verano, a los eventos que hacían en su trabajo para las familias, nos llevaba a urgencias, pasaba noches en vela cuando estábamos malos, cuando empecé a salir "de marcha" venía a recogerme...En fin, son muchas cosas...Estas son las primeras que se me vienen a la cabeza, pero lo mejor de mi padre (junto a mi madre) es que nos ha enseñado a ser como es él: buena gente y nos ha transmitido buenos valores humanos que es lo que realmente perdura.
Tengo que decir que soy la única chica de mi casa, así que mi padre siempre me ha "vigilado" muy de cerca, recuerdo perfectamente el día de mi boda, estaba más nervioso que yo, su cara era una mezcla de felicidad y resignación y esto me pareció a la vez divertido y entrañable. Hay mucho que agradecerle, pues él siempre lo ha dado todo por nosotros y lo sigue haciendo. Ahora ha pasado a desempeñar su papel de abuelo, con el que se le ve muy puesto y es que que se le cae la baba con las dos nietas que tiene ya. ¡Y enseguida serán tres! (Tranquilos, no es mía...).
El padre reciente del que quiero hablaros, celebra hoy su tercer día del padre, y es el papá de chiquitica. Este año ha sido muy duro para él, pero ha pesar de todo ha sido un padre inmejorable para la peque. Y es que, hace un año, la crisis nos dejó a ambos en el paro (por suerte yo he vuelto al trabajo), y eso junto con todo lo de Paula ha sido difícil de sobrellevar. Pero, como siempre, uno intenta sacar la parte positiva de todo, y debido a su situación actual, he podido comprobar que la niña ha tenido mucha suerte con el padre que le ha tocado, así que: "papá, al final elegí bien, puedes estar tranquilo".
Y es que, el papá de chiquitica no es de los que ayudan con la peque, es de los que se encargan de ella: da largos paseos con ella de la mano (ciudad, playa,campo, dónde sea), la lleva a todos los parques habidos y por haber, juega con ella a hacer construcciones, tiene una habilidad especial para conseguir que se quede dormida, la hace reír como nadie, le imita TODOS los animales de una forma espectacular, le da el desayuno y le lleva a la guardería todos los días, le enseña cosas, le hace dibujos, le lee cuentos, le pone música, baila con ella...En definitiva, pasa horas con ella disfrutándola y haciendo que la niña sea muy féliz...Y yo se que ver así a la niña es su mayor recompensa.
Con estas palabras quiero felicitar a todos los papás del mundo, recientes o veteranos, que seguro que se ven reflejados en muchas de estas cosas.
¡Que paséis un muy féliz día del padre!
PD: El regalo que teníamos preparado para el papi de la peque, aparte de los de la guarde y varios dibujos, ha sido un álbum con montajes de fotografías, principalmente de ellos dos, con algunos mensajitos, y decorado con washi tape..Le ha encantado!!