Fez - Viaje a Marruecos

Por Abuelohara @Abuelohara

Fez es nuestro primer destino en este interesante y atractivo viaje por el norte de África. No es una ciudad tan grande como Casablanca, Marrakech o Rabat, conserva tradiciones y estilos de vida muy auténticos. La llamadas a la oración son continuas y te acompañaran, quieras o no, desde las cinco de la mañana creando un ambiente sonoro y mágico propio de los países musulmanes.

Hay quienes comparan a Fez con la antigua ciudad amurallada de Jerusalén. Seguramente es algo exagerado, pero no cabe duda de que ocupa el primer lugar de las ciudades imperiales de Marruecos, lidera los lugares de culto musulmán y posee una de las universidades más antiguas del mundo, siendo conocida como la capital cultural y espiritual de Marruecos.

Nos alojamos en el Hotel Jardin Public, muy cerca de una mezquita cuya llamada a la oración te despierta muy temprano, a un corto paseo de la puerta Bab Chorfa, el Parque Jnane Sbil, las colosales murallas de la antigua ciudad o la Medina de la ciudad vieja a la que accedemos por la preciosa Puerta Azul o Bab Boujloud "The Blue Gate". Enseguida comprobamos como las viviendas se convierten en talleres de artesanía o tiendas y todo espacio es ocupado para el comercio o la vivienda.

Llaman la atención las laberínticas y estrechas calles y callejones de la Medina de Fez el-Bali, que presume de ser la mejor conservada del mundo árabe. Quizá porque sus calles son tan enrevesadas y estrechas que solo los burros, los pequeños carros y en pocas ocasiones las motos son el único medio de transporte. Solo acompañados de un guía como hicimos nosotros os asegura la orientación en ese entramado de callejuelas y poder conocer sus secretos.

La visita a Fez fue muy rápida, pero tuvimos la ocasión de recorrer la Medina de Fez el-Bali, y ver desde fuera la Mezquita Karaouine que es la segunda mezquita más grande de Marruecos después de la de Hassan II en Casablanca, y el lugar más sagrado de Fez. Solo verlo desde alguna de sus puertas de entrada merece mucho la pena.

Escondida en lo más profundo y entramado del corazón de la Medina, la mezquita Universidad de Karaouine está cerrada a los no musulmanes y solo podemos admirar su belleza desde fuera. La estampa de ver familias enteras descansar, rezar o estudiar en sus patios es muy llamativa para los occidentales. Su minarete data del año 956 y es el monumento islámico más antiguo de Fez, además de contener una de las bibliotecas más antiguas e importantes del mundo.

Desde la azotea de nuestro hotel durante la noche pudimos ver a lo lejos escasamente iluminadas, las Tumbas Merinides. A la mañana siguiente después del desayuno, aunque no llegamos a ellas, pudimos visitar el Mausoleo de Abou Bakr ben Larbi y el cementerio musulman al otro lado de las murallas. Es muy curiosa la orientación de las tumbas en sentido norte-sur, con el cadáver de costado mirando hacia La Meca directamente sobre la tierra.

Fez continúa en mi lista de viajes. fue tan fugaz la visita que no pudimos ver todo lo que hubiéramos deseado. Si contáis con tiempo suficiente no olvidéis ver sus Murallas, el barrio judío, el barrio de las pieles, el Parque Jnane Sbi, el Palacio Real, la Medersa Attarine o el santuario de Moulay Idriss II entre otros. Esta vieja ciudad tiene cientos de lugares y secretos que visitar y seguro que ninguno de ellos os deja impasibles.


Algunas fotografías más de FEZ: