Fue en el restarurante "Las tortillas de Gabino" en Madrid, un local que prepara estupendas tortillas, muy a mi gusto, no muy cuajadas, como aquellas que hacían ellos mismos hace tiempo en "La Ancha", donde probé por primera vez este Fisotto hecho con fideos, y basandome en su recuerdo, he preparado esta receta.
Para preparar un Fisotto de Hongos y tomates secos para dos ó tres personas como el que tenéis en las fotos, necesitaremos, media cebolleta, 2 tomates secos, un boletus edulis troceado (yo usé deshidratado de Trevijano) medio vaso de vino blanco y un caldo casero de verduras. Además 50 gramos de fideos cabellín por persona.
Nota importante. Esta forma de cocinar la pasta es perfecta para cualquier tipo de pasta corta, por lo que podeis preparar así macarrones, tulipanes, espirales o cualquier otra de vuestro gusto. También fideos gruesos, por supuesto, pero yo usé estos cabellín, por ser fiel a mi recuerdo del que tomé la primera vez. En la foto superior tenéis un resumen paso a paso de la receta que pasamos a detallar.
Lo primero que haremos será rehidratar tanto el tomate como los hongos en trozos (si usáis deshidratado) y para ello los sumergimos en agua caliente durante unos 15 minutos. Al igual que cuando hicimos el Risotto de hongos (aquí tienes la receta paso a paso) comenzamos rehogando la cebolleta bien picada a fuego lento, hasta que esté transparente y empiece a dorarse. Escurrimos los hongos y los incorporamos con la cebolla y troceamos el tomate rehidratado y lo rehogamos también. Cuando todo empieza a dorarse y tomar un color parecido al de la foto superior a este párrafo, añadimos los fideos.
Un truco, añadid al caldo de verduras el agua de rehidratar los hongos, y tendrá aún más aroma. El fuego lo ponemos en un nivel medio. Hay que tener un par de cosas en cuenta. Primero, que la pasta crece bastante al absorber el agua por lo que aunque parezca poca cantidad al principio, luego sobrará. Segundo, aunque un fideo como este, hecho en un caldo para hacer sopa puede estar perféctamente cocido en 2 ó 3 minutos, al hacerlo así cacito a cacito, necesitará aproximadamente 8 ó 10 minutos. Tendréis que probarlo para ver cuando está bien meloso por fuera y aún con un puntito crujiente o al dente en el centro.
En la foto superior, el máximo de caldo que puede haber en cada momento en vuestra sartén. En la foto inferior el punto final que tienen los fideos ya listos para emplatar. ¿Véis que cremosos parecen?