La nueva ley antitabaco que rige en nuestro país ha hecho que numerosas personas estén intentando dejar de fumar, no tanto por gusto como por necesidad en la mayoría de los casos. Precisamente por este motivo les es necesario un plus de motivación que les ayude a pasar más fácilmente por esta situación.
Cigarrillos electrónicos, parches de nicotina, chicles…las farmacias y otros muchos establecimientos no dan al abasto en dispensar métodos y terapias que ayuden a dejar de fumar: medicamentos, homeopatía, acupuntura, hipnosis… Uno de los tratamientos alternativos más efectivos en este sentido es el tratamiento que se realice en base a las esencias de Flores de Bach.
Las Flores de Bach se basan en la idea de que todo el mundo nos enfrentamos a una situación de manera diferente. Por lo tanto cuando una persona deja de fumar asume los síntomas que se producen a su modo, aunque sean los mismos que los de los demás. Por eso debemos analizar la situación emocional de cada paciente que deja de fumar antes de decidir cuales son las Flores que necesita para paliar sus síntomas.
No olvides que la terapia floral de Bach es completamente inocua, no tiene ningún tipo de efecto secundario para quien la toma y resulta mucho más barata que cualquier otro tipo de tratamiento, tanto médico como alternativo, para ayudarte a dejar de fumar. Pese a lo que puedan opinar los médicos tradicionales la verdad es que aporta muchos beneficios terapéuticos que ayudan a soportar mejor el proceso a los que están dejando de fumar.
Las Flores de Bach más usadas para ayudar al ‘desenganche’ del tabaco son la Crab Apple (que ayuda a eliminar toxinas de nuestro cuerpo), la Cherry Plum (que nos equilibra internamente para ayudarnos a tener valor de abandonar el hábito), la Chestnut Bud (que nos da la madurez para no recaer en el fumar) y la Agrimony, que nos ayuda a sobrellevar la ansiedad y la irritación producida por la falta de tabaco.