La calle en su devenir constante de movimientos es siempre distinto, diferente aunque sea la misma esquina de tu barrio. La luz siempre es diferente, la gente que va y viene cambia cada día. Esa incertidumbre y la constante transformación de las cosas en un espacio público es un menú muy atractivo para cualquier fotógrafo urbano exigente.
(c) Gueorgui Pinkhassov
En ese contexto, una forma bastante práctica de organizar los elementos para darle dinamismo y profundidad de campo a la instantánea es a base de triángulos del cual ya hablamos en varias ocasiones en este blog. Para los coloristas, triangular colores es una forma habitual de generar una composición potente y dinámica.(c) Nikos Economopoulos. Ghana, 2017
Otra forma práctica cuando no hay mucho tiempo para organizarse (porque las cosas en la calle ocurren muy rápido y son imprevisibles) es intentar organizar la composición como si se tratara de un libro abierto.
(c) Nikos Economopoulos. México, 2017
Todo ello, “triángulos” y “libros abiertos” son mucho más prácticos de organizar cuando intentas ver la escena, de frente, como si se estuvieras viendo una obra de teatro y tú, "desde la primera fila", intentas componer.
Hasta pronto!
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