El próximo 22 de diciembre se cumplen 20 años desde que las Naciones Unidas declararan el día 22 de marzo como el Día Mundial del Agua. Este líquido, esencial para la vida en la tierra es además una fuente de espiritualidad en todas las religiones y creencias que comparte el ser humano.
Las fotografías y la información en este artículo reflejan el trabajo de Masaru Emoto, un investigador japonés creativo y visionario autor del libro, “Mensajes del Agua”, a partir de las conclusiones de su investigación en todo el mundo. Si tienes alguna duda de que tus pensamientos afectan todo lo que hay a su alrededor, la información y las fotografías que se presentan aquí, tomadas del libro de sus resultados publicados, van a cambiar tu mente y alterar profundamente tus creencias,.
El agua es una sustancia muy maleable. Su forma física se adapta fácilmente a cualquier entorno en el que esté presente. Sin embargo, su apariencia física no es la única cosa que cambia, su forma molecular también cambia. La energía o vibraciones del ambiente cambian la forma de la molécula de agua. En este sentido el agua no sólo tiene la capacidad de reflejar visualmente el medio ambiente sino que también molecularmente refleja el entorno.
El señor Emoto ha estado documentando visualmente estos cambios moleculares en el agua por medio de sus técnicas fotográficas. Congela las gotas de agua y luego las examina bajo un microscopio de campo oscuro que tiene capacidades fotográficas. Su trabajo demuestra claramente la diversidad de la estructura molecular del agua y el efecto del ambiente sobre la estructura del agua.
La nieve ha estado cayendo sobre la tierra durante más de unos pocos millones de años. Cada copo de nieve, como hemos dicho, tiene una forma y estructura muy particular. Al congelar el agua y tomar una fotografía de la estructura, el estudio demuestra que existen ciertas diferencias importantes dependiendo del origen de la misma y de una serie de factores que incluyen mensajes espirituales lanzados sobre las mismas.
Sr. Emoto ha descubierto muchas diferencias fascinantes en las estructuras cristalinas de agua proveniente de muchas fuentes diferentes y diferentes condiciones en todo el planeta. Por ejemplo, el agua de los arroyos de montaña, de aguas cristalinas y fuentes muestran diseños geométricos hermosamente formados en sus patrones cristalinos. El agua contaminada y tóxica de las zonas industriales y pobladas y el agua estancada de las tuberías de agua y presas de almacenamiento muestran definitivamente una distorsión de figuras que a la vista del ojo humano son desagradables y feas.
La terapia musical se aplica hoy en día en la crianza de aves, cerdos, caballos, terneras y plantas demostrando que esta es efectiva para la salud tanto de humanos como de los animales y el reino vegetal. Con la reciente popularidad de esta terapia, el Sr. Emoto decidió ver por si mismo los efectos que la música tiene sobre la estructuración del agua. Coloca agua destilada entre dos altavoces durante varias horas y luego fotografía los cristales que se forman después de que el agua es congelada.
Después de ver que el agua reaccionan a diferentes condiciones ambientales, la contaminación y la música, el señor Emoto y sus colegas decidieron ver cómo los pensamientos y las palabras afectan a la formación de cristales sin tratar, agua destilada, usando palabras escritas en un papel por un procesador de textos y grabados en botellas de vidrio durante la noche. El mismo procedimiento se realizó con los nombres de personas fallecidas. Gotas de agua procedentes de estos envases fueron congelados y fotografiados.
Estas fotografías demuestran como los pensamientos y emociones humanos así como la música pueden afectar a la estructura del agua consiguiendo que esta adopte formas increíblemente hermosas o totalmente desagradables. Si tenemos en cuenta que el cuerpo humano esta compuesto en su mayoría por este valioso líquido, ¿cómo podrían afectar los pensamientos a nuestro cuerpo humano a través del agua?
El extraordinario trabajo de Masaru Emoto es un despliegue impresionante, y una herramienta de gran alcance, que puede cambiar nuestra percepción de nosotros mismos y del mundo en en que vivimos, para siempre. Ahora tenemos evidencia profunda de que técnicas como el Reiki pueden afectar positivamente, sanar y transformarnos a nosotros y a nuestro planeta por los pensamientos que elegimos pensar y la manera en la que ponemos esos pensamientos en acción.
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