Nuestra cara está sometida a múltiples factores que van a acelerar su envejecimiento, como una mala alimentación, beber poco agua, dormir poco, no usar cremas adecuadas, fumar y nuestro gran enemigo: el sol.
Los efectos del envejecimiento en la piel son muy numerosos: las fibras de colágeno y elásticas disminuyen y pierden elasticidad, aparecen manchas, la dermis se vuelve más delgada, y la grasa subcutánea disminuye, entre otros efectos.
Existen multitud de tipos de arrugas y en cada persona son diferentes, pero se pueden dividir, básicamente, en dos grupos:
- Arrugas de expresión: Se producen por la gesticulación, como por ejemplo en el entrecejo, las zonas frontales, o los contorno de los ojos.
- Arrugas gravitacionales: Son producidas por la fuerza de la gravedad sobre los tejidos. Estas son básicamente las arrugas del cuello, de los párpados, del mentón, etc.
Entre las muchas herramientas que tenemos para ralentizar el envejecimiento están la mesoterapia, el peeling médico, o los rellenos. Hay que tener claro que estos tratamientos no son de antienvejecimiento, sino que su efectividad radica en la ralentización del envejecimiento.
La gimnasia facialSin embargo, la gran desconocida es la gimnasia facial. Con ella, vamos a tonificar toda la musculatura de la cara y del cuello, lo que nos va a ayudar a prevenir o a atenuar las arrugas gravitatorias o las ocasionadas por la flacidez.
Como en el resto del cuerpo, cuanto antes empecemos a hacer gimnasia facial más tardaran en aparecer las arrugas y otros signos de envejecimiento.
Además de todo lo dicho anteriormente, es muy importante saber que la gimnasia facial es válida tanto para hombres como para mujeres.