¿Cómo se hace?1. Quita a las fresas las hojas verdes, trocea las frutas y ponlas en un bol.2. Añade un chorrito de leche desnatada, aproximadamente la mitad de leche que de fresas.3. Espolvorea la sacarina al gusto. Si no tenéis en polvo o líquida podéis mezclar unas pastillas con un poco de leche y meterlo en el micro unos segundos.4. Bate todo y si te gusta más líquido añade leche.5. De forma opcional podéis decorarlo con nata y trocitos de chocolate como en la foto, pero esto ya hace que engorde mucho más...
Esta receta la podéis hacer con cualquier fruta que se os ocurra, queda muy rico con sandía, melón, mango... pero si lo hacéis con piña después tendréis que colar el smoothie para que no queden fibrillas. Ahora en verano está muy rico si echáis el batido en un vaso con hielo picado, ¡es una merienda muy sana y refrescante!