Son cajetillas de tabaco de Nueva Zelanda, país por el que anda de viaje una amiga mía -quien me envía estas fotos- informándome del hecho curioso que hoy comparto con Uds.
Este país, como otros también lo hicieran, adoptó el firme propósito de dirigirse hacia el empaquetado único de cigarrillos, eliminando logos identificativos y dedicando una buena parte de la cajetilla a destacar, mediante imágenes y avisos (en inglés y en maorí), las consecuencias del hábito de fumar...
Aún así, y simplemente recordando el precio de cada cajetilla -en torno a los 18 Euros- no parece que sean necesarios muchos más argumentos... Por otra parte, hablamos de un país en el que el tabaco parece estar oculto, vendiéndose sólo en determinadas licorerías, en las que -por otra parte- tampoco se expone al público...
No obstante así, se prevé que estos precios del tabaco sigan al alza hasta 2025, año en el que se pretende conseguir su total retirada.